- Jesus, dijo: Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
- Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.
- El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creido en el unigénito Hijo de Dios.
- Y ésta es la condenacion: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas.
- Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas.
- Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios.
- Oh mi Cristo, todo lo inverosímil ha lugar en tu excelsa diestra.
- La condenación se ve proscrita, por el Cristocéntrico discípulo que haya recibido el don de la fe.
- Los sépticos e irreverentes seres humanos que no crean en el Soberano Redentor Jesucristo, han dado por hecho el ser condenados.
- Los que no fueron solícitos a la meridiana luz, fueron a condenación por recibir con jactancia a las entebrecidas tinieblas.
- El hecho insoslayable de no revestirse de la luz celestial, se torna irremisiblemente en eternas sepulturas.
- Porque la bendita gloria, oh Señor, concierne de eternidad únicamente a tus discipulos santificados.
- Paz de Cristo
sábado, 6 de septiembre de 2025
LA DISOLUCIÓN PRESIDE LA VIDA DEL QUE FINGE CREER EN EL TODOPODEROSO SEÑOR Y SALVADOR JESUCRISTO
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