LA HIPÓCRESÍA, OBSCURA MÁSCARA DEL SER HUMANO, OH CRISTO

• La Biblia enseña: Oid, los que estáis lejos, lo que he hecho; y vosotros los que estáis cerca, conoced mi poder.
• Los pecadores se asombraron en Sion, espanto sobrecogió a los hipócritas. ¿Quién de nosotros morará con el fuego consumidor? ¿Quién de nosotros morará con las llamas eternas?
• El que camina en justicia y habla lo recto; el que aborrece la ganancia de violencias, el que sacude sus manos para no recibir cohecho, el que tapa sus oídos para no recibir propuestas sanguinarias; el que cierra sus ojos para no ver cosa mala;
• éste habitará en las alturas; fortaleza de rocas será su lugar de refugio; se le dará pan, y sus aguas serán seguras.
• Oh mi Cristo, un sinnumero de hordas son las que desoyen la Sagrada Palabra; porque les persuade su inicua conducta, para en el precepto bíblico no permanecer.
• Sin embargo, los profanos están en sobreaviso de las letales consecuencias. 
• Al final dictará sentencia la sagrada balanza,
• que pesará de cada corazón humano, todas su perversas andaduras.
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• Oh Sumo Alfarero, 
• tu excelsa misericordia en la cruz del Calvario, 
• hizo que del templo que se rasgase de arriba abajo el velo,
• para raer el pecado de la disoluta humanidad, oh gran Yo Soy, desde tu glorioso santuario.
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• Oh Eterno, 
• Tú eres muy celoso de tu gloria.
• Y nadie traspasará el umbral del cielo, 
• si no hubiere sido coronado en victoria. 
•            Paz de Cristo