PROVERBIOS 8:34-36 EN CRISTO

• Bienaventurado el hombre que me escucha, velando a mis puertas cada día, aguardando a los postes de mis puertas. 
• Porque el que me halle, hallará la vida, y alcanzará el favor de Jehová. 
• Mas el que peca contra mí, defrauda su alma; todos los que me aborrecen aman la muerte.
• Oh mi Cristo, el que vive en tu Espíritu, reconoce celosamente tus prodigiosas obras.
• El que interioriza la Sagrada Palabra, a entendido la gloriosa antítesis de lo mortal.
• En el abismo sólo hay obscuridad nefanda; el paganismo sólo opta a lo letal eternamente. 
•           Paz de Cristo