PROVERBIOS 8:8-10 EN CRISTO

• Justas son todas las razones de mi boca; no hay en ellas cosa perversa ni torcida.
• Todas ellas son rectas al que entiende, y razonables a los que han hallado sabiduría. 
• Recibid mi enseñanza, y no plata; y ciencia antes que el oro escogido.
• Oh mi Cristo, majestuosas son tus instrucciones a toda alma disoluta y hasta el extremo perdida.
• Porque siervo docto, oh Señor, es el que en tu santo nombre se gloría.
• El precepto bíblico se erige en la corrección de socorrer al siervo advenedizo y arrogante todavía. 
•           Paz de Cristo