TÚ ADORAS, PARA QUE LA GLORIA DEL ALTÍSIMO SEÑOR JESUCRISTO SE MANIFIESTE EN EL MUNDO

• Jesús le dijo: Mujer, créeme, que la hora viene cuando ni este monte ni en Jerusalén adoraréis al Padre. 
• Vosotros adoráis lo que no sabéis; nosotros adoramos lo que sabemos; porque la salvación viene de los judíos. 
• Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adoran al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren. 
• Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren.
• Oh mi Cristo, tu perfecta obra en la cruz del Calvario, estaba a punto de consumarse. 
• Oh Soberano Redentor, benditos por los siglos son tus Cristocéntricos juicios.
• Y tu gloria será manifiesta, oh Rey de reyes, a los que tu santo nombre invocaren;
• y fervientemente te adoraren.
•          Paz de Cristo