que es el vínculo perfecto.
Y sereis moradores de Sión, oh Señor,
con corona y cetro.
Habremos de ponderar cada vicisitud, oh Señor Jesucristo,
e inquirir el suceso con la verdad.
Ha de ser un juicio justo,
de cristiana integridad.
Oh Cristo Jesús, el mensaje del Evangelio,
hará rectos los pensamientos del corazón.
Sin prebendas de privilegio,
que no abrirán la enjuta puerta de la salvación.
Ayudad a toda alma indigente,
inmersa en las inicuas tinieblas.
Sed con vuestra actitud en Cristo, el referente.
Y que el resplandor de la Palabra, llene de luz sus lúgubres celdas.
Defended siempre al inocente,
aunque os cueste la vida.
Y seréis recompensados, oh Señor Jesús, eternamente,
con el galardón de la gloria bendita.
Paz de Cristo
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