- La Bibia dice: Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.
- Y él es la propiciación por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo.
- Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos.
- El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él;
- pero el que guarda su palabra, en éste verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él.
- El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo.
- Oh mi Cristo,
- ninguno de tus siervos, estuvo en otro tiempo fuera de lo espiritualmente moribundo.
- Y todas nuestras vilezas, no fueron impedimentos,
- para, oh Rey de la gloria, tener en tu santo nombre fe;
- y esta gloriosa fe,
- nos sacó de un estado nauseabundo.
- Oh Rey de reyes,
- tus piadosos fundamentos,
- nos han revestido de los más grandiosos bienes espirituales;
- para ser fieles, oh Señor, a tus santísimos mandamientos.
- Oh Cristo Redentor,
- tu sacrificio en la cruz del Calvario, es digno de la mayor adoración.
- Y es que, no tuvo tu excelso amor,
- ningún otro parangón.
- Oh Cristo Altísimo,
- tus actos, a cual más piadoso, hemos de interiorizar.
- Y es en el Lugar Santísimo,
- donde para seguir tus pasos de sobrenatural piedad, con celoso fervor nos hemos de postrar.
- Oh Eterno,
- inherentes hemos de ser a tu piedad.
- Porque para dar lugar al cielo,
- hemos de confrontarnos piadosamente con la única verdad.
- Paz de Cristo
lunes, 20 de marzo de 2023
VIVE TU PIEDAD EN CRISTO
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