GUÁRDANOS EN TU GLORIOSA ETERNIDAD, OH CRISTO

• La Biblia dice: Señor, tú nos has sido refugio de generación en generación. 
• Antes que naciesen los montes y formases la tierra y el mundo, desde el siglo y hasta el siglo, tú eres Dios. 
• Vuelves al hombre hasta ser quebrantado, y dices convertíos, hijos de los hombres. 
• Porque mil años delante de tus ojos son como el día de ayer, que pasó, y como una de las vigilias de la noche.
• Oh mi Cristo, en toda la humanidad se fundamentó la obra perfecta de tu redención.
• Pero a las tinieblas sólo se opusieron los siervos consagrados;
• todos los demás sucumbieron a sus pecados ancestrales,
• siendo extremadamente antagónicos a su reproche.
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• Oh Alfa y Omega, 
• Tú eres el primero y el último, el principio y el fin.
• Y del eterno santuario emana la sobrenatural gracia,
• para que la salvación alcance al ser humano más vil.
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• Oh gran Yo Soy, 
• el arrebatamiento de tu amada Iglesia, 
• será sorpresivamente en un día como hoy;
• así que, preserva celosamente tu veleidoso corazón, para que su peso en la sagrada balanza sea de pureza.
•             Paz de Cristo