- Porque ninguno de nosotros vive para sí, y ninguno muere para sí.
- Pues si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para elbSrñor morimos. Así pues, sea que vivamos, o que muramos, del Señor somos.
- Porque Cristo para esto murió y resucitó, y volvió a vivir, para ser Señor así de los muertos, como de los vivos.
- Pero tú, ¿Por qué juzgas a tu hermano? o tú también, ¿Porque menosprecias a tu hermano? Porque todos compareceremos ante el tribunal de Cristo.
- Porque Cristo esta: Vivo yo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, y toda lengua confesaré a Dios.
- De manera que cada unobde nosotros dará a Dios cuenta de sí.
- Así que, ya no nos yuzguemos más los unos a los otros, sino más bien decidido no poner tropiezo u ocasión de caer al hermano.
- Yo sé, y confío en el Señor Jesús, que nada es inmundo en sí mismo; mas para el que piensa que algo es inmundo, para él lo es.
- Oh mi Cristo, Tú eres el primero y el último, el principio y el fin.
- Y de tu paraíso eterno, oh Señor, somos tus irreprensibles heraldos.
- La resurrección anhelada, se hará manifiesta en los que para el gran Yo Soy perviven.
- Porque nadie eludirá la indefectible justicia del Eterno.
- Y es que, con quebrantamiento de espíritu, y rodilla genuflexa, estaremos a tus pies, oh Rey de la gloria, eternamente postrados.
- Meridianamente claro expresa el texto bíblico: la salvación es individual, sin ningún otro matiz.
- Y de gracia has recibido, para dar gracias al que persiga con celo ser salvo.
- Porque para la salvación del alma, es insoslayable el don de la fe.
- Paz de Cristo
martes, 31 de diciembre de 2024
ROMANOS 14:7-14 EN CRISTO
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