SALMO 84:11,12 EN CRISTO

• Porque sol y escudo es Jehová Dios; gracia y gloria dará Jehová. No quitará el bien a los que andan en integridad. 
• Jehová de los ejércitos, dichoso el hombre que en ti confía. 
• Siempre ha de ser atalaya de la verdad,
• oh Sumo Hacedor, el que en tu santo nombre se gloría. 
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• La Biblia dice: Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.
• Y a los que predestinó, a estos también llamó; y a los que llamó, a estos también justificó; y a los que justificó, a estos también glorificó. 
• Y es que, recibimos de gracia el incomparable honor, oh Rey de la gloria, de ser por ti santificados;
• y desde antes de la fundación del mundo, linaje suyo somos; porque en su glorioso santuario a sus escogidos guardó. 
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• La Biblia enseña: Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. 
• Porque lo que era imposible para la ley, por cuanto era debil por la carne, Dios enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne; para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. 
• Nuestra fortaleza en tu gozo permanece, 
• oh mi Altísimo Señor y Salvador Jesucristo. 
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• Jesús, dijo: En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy pues, a preparar lugar para vosotros. 
• Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis. 
• Oh Cordero inmolado, eternos deudores somos; 
• cuando en tu ajusticiamiento en la cruz del Calvario, tuviste la excelsa piedad de ofrendar el majestuoso perdon, a los que flagrantemente te escarnecieron y vituperaron; dando por hecho, que su alma homicida nunca se podría arrepentir.
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• Oh Sumo Redentor, 
• Infinitas gracias por sacarnos de las tinieblas, y llevarnos a tu luz admirable. 
• Sabemos que de todo conocimiento excede tu sagrado amor, 
• por ser, oh Alto y Sublime, eterno e inefable. 
•                         Paz de Cristo