Powered By Blogger

domingo, 11 de abril de 2021

ISAÍAS 23:3,4 EN CRISTO

  • Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado. 
  • Confiad en Jehová perpetuamente, porque en Jehová el Señor está la fortaleza de los siglos. 
  • Oh Cristo Jesús, los de doble ánimo nunca estarán a tu lado;
  • porque han sido siempre tibios.

  • Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame.
  • Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará. 
  • No existe mediocre, que lleve recto el timón del arado, y con poderosa actitud are;
  • y es que, debido a su ambigüedad fracasará. 

  • Jesús, anuncia: Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.
  • La paz os dejo, mi paz os doy; yo no la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.
  • Oh Rey de la gloría, nos has revestido con el blindaje de tu eterno refugio, 
  • para que la unción en tus siervos, se haga visible desde el último hasta el primero.

  • La Biblia enseña: Pero la sabiduría que es de lo alto es primeramente pura, después pacífica, amable, benigna, llena de misericordia y de buenos frutos, sin incertidumbre ni hipocresía. 
  • Y el fruto de justicia se siembra en paz para aquellos que hacen la paz. 
  • Oh Altísimo Señor Jesucristo, Tú nos has dado la vida,
  • para poder traspasar el umbral de la eternidad. 
  •  
  • La Biblia enfatiza: Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Padre Eterno, Príncipe de Paz.
  • ¡Su nombre es Jesús! Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos. 
  • Oh Santo de Israel, la espada de tu Espíritu es la Palabra, y en ella nos revelas la doctrina de Unicidad,
  • para darnos a conocer al gran Yo Soy, por ser sus hijos consagrados. 
  •                    Paz de Cristo 

No hay comentarios:

Publicar un comentario