- De una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así.
- ¿Acaso alguna fuente echa por una misma abertura agua dulce y amarga?
- Oh mi Cristo, haznos libre en tu sentir;
- dándole a entender al corazón, el propósito de tu Sagrada Palabra.
- Oh Cristo Jesús,
- en tu gloriosa omnisciencia es imposible la confusión.
- Pero la perniciosa necedad del ser humano, no interioriza tu admirable luz,
- que en su prodigiosa vida, oh Señor, has derramado a la sazón.
- Oh Altísimo Jesucristo,
- nuestra desproporcionada deuda con tu redención, nos es imposible poder asumirla fielmente al extremo de su sobrenatural poder.
- Sin embargo, no le pongas límites al Santo Espíritu,
- si aún puedes creer.
- Oh Santo de Israel,
- desecha en nosotros lo aberrante de nuestro pensamiento.
- Sabiendo por fe,
- que nos diste vida con tu aliento.
- Oh Alto y Sublime,
- te doy gracias por tus Cristocéntricos mensajes poéticos.
- Pero en nada me exime,
- oh Rey de la gloria, para no ser hacedor de tus bíblicos textos.
- Paz de Cristo
sábado, 10 de abril de 2021
SANTIAGO 3:10,11 EN CRISTO
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario