PROVERBIOS 25:1-3 EN CRISTO

• También éstos son proverbios de Salomón, los cuales copiaron los varones de Ezequías, rey de Judá. 
• Gloria a Dios es encubrir un asunto; pero honra del rey es escudriñarlo.
• Para la altura de los cielos, y para la profundidad de la tierra, y para el corazón de los reyes, no hay investigación. 
• Oh mi Cristo, el pueblo nada sabrá, 
• si a los profetas no se lo hubieres contado, 
• con tu celestial revelación. 
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• Quita las escorias de la plata, y saldrá alhaja al fundidor.
• Aparta al impío de la presencia del rey, y su trono se afirmará en justicia. 
• Oh Sumo Formador,
• es tu sabiduría de lo alto, la que la sed de tus siervos sacia.
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• No te alabes delante del rey, ni estés en el lugar de los grandes; 
• porque mejor es que se te diga: Sube acá, y no que seas humillado delante del príncipe a quien han mirado tus ojos.
• Oh gran Dios, tus excelencias son diametralmente opuestas a nuestras vanidades;
• propias de corazones veleidosos. 
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• No entres apresuradamente en pleito, no sea que no sepas qué hacer al fin, después que tu prójimo te haya avergonzado.
• Trata tu causa con tu compañero, y no descubras el secreto a otro, 
• no sea que te deshonre el que lo oyere, y tu infamia no pueda repararse.
• Oh gran Dios, Tú ya has sentenciado; 
• al que siendo iluso,
• no supo retractarse. 
•              Paz de Cristo