- Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas.
- Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios.
- De lo cual se deduce, que la convicción de pecado es reconocida por todas las almas;
- pero solo los que reprueban el pecado, oh Señor, son tus irreprensibles discípulos.
- Perdónanos, oh Cristo,
- por haber dado rienda suelta a nuestra grotesca vanidad, de querer burlar tu omnipresencia.
- Aun escondidos en multitud de mascaras, no vivimos en el anonimato para el Santo Espíritu;
- porque conoce todos y cada uno de los pasos de nuestra existencia.
- La humanidad se edifica de forma nefasta, oh Alto y Sublime, sobre una mentira colectiva.
- Mimbres muy fragiles, oh Fiel y Verdadero, son los que sustentan el sofisma social.
- Y haciendo caso omiso a la Sagrada Palabra de Dios, se da el necio visto bueno a su funesta acción destructiva;
- no asumiendo que su fatuo plan, ha de recibir el juicio postrero del Todopoderoso Señor celestial.
- Jesús, dijo: Toda planta que no plantó mi Padre celestial, será desarraigada.
- Dejadlos; son ciegos guías de ciegos; y si el ciego guiare al ciego, ambos caerán en el hoyo.
- Ningún alma que no te obedezca, oh Rey de reyes, podra ser bienaventurada,
- sino que en el Seol habrá cabado su propio foso.
- El plan de salvación,
- obedece al pensamiento eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.
- Y habrás de circuncidar el prepucio de tu corazón;
- para ser fiel al cumplimiento de la verdad, que emana del Santo Espíritu.
- Paz de Cristo
miércoles, 2 de diciembre de 2020
JUAN 3:20,21 EN CRISTO
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