- Los misterios de la Sagrada Palabra;
- no se desvelan, sino con el máximo grado de fe en el Altísimo Señor Jesucristo.
- La Escritura es muy sencilla para el que a Dios ama;
- y consagra su existencia, poniendo por obra la verdad del Santo Espíritu.
- La lectura del Sagrado Escrito,
- ha de ser consubstancial a ahondar persistentemente en las profundidades de su celestial revelación.
- Creer en el Santo de Israel, al que no hemos visto,
- ha de edificar, sin fisuras, la fidelidad de nuestro veleidoso corazón.
- Jesús, aseveró: Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, cuando dijo: Este pueblo de labios me honra: mas su corazón está muy lejos de mí.
- Pues en vano me honran, enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres.
- La indisposición del alma, nunca podra ver la gloria del Señor de principio a fin;
- porque su obediencia, no está incensada con fragantes loores.
- Oh Soberano Señor,
- el diablo ha distorsionado la excelencia de tu Palabra, adulterándola con la perversa idolatría.
- Sí, el vínculo perfecto es el amor;
- pero el seudocristiano con sus máscaras, hace de su irreverencia una absoluta osadía.
- La Biblia dice: Porque por gracia sois salvos por medio de la fe: y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.
- Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.
- ¿A la voluntad del Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, quién desdice?
- ¡Sométete con toda tu alma a la belleza de sus santísimas promesas!
- Paz de Cristo
viernes, 4 de diciembre de 2020
LA FE, MISTERIO INSONDABLE EN CRISTO
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