POR LA INDIGNA HUMANIDAD, DISTE TU VIDA, OH CRISTO

• Oh Cristo, Tú fuiste el inocente Cordero inmolado, 
• que diste tu santísima vida en la cruz del Calvario, para libertar a los abominables seres humanos.
• Este sagrado misterio nos ha sido revelado,
• a los siervos que creemos en el Rey de reyes, y que por nuestros pecados ajusticiamos.
• 
  
• Jesús, dijo: ¡Generación de víboras! ¿Como podéis hablar lo bueno siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca.
• El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro saca malas cosas.
• Y es que, el hombre errático a lo ambiguo invoca;
• porque no tiene voluntad de poner fin, a sus conductas perniciosas.
• 
  
• La Biblia dice: ¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo.
• ¡Ay de los sabios en sus propios ojos, y de los que son prudentes delante de sí mismos!
• La veleidad del fatuo,
• le hace creerse sus propios sofismas libertinos.
• 
  
• Jesús, enseña: Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio. 
• Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado. 
• Sí, porque por acción o por omisión, nada de tu vida pasará inadvertido,
• para el Señor de todo lo creado.
• 
  
• La Biblia asevera: El que venciere heredará todas las cosas, y yo seré su Dios, y él será mi hijo.
• Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda. 
• Con genuinas vestiduras blancas tendrás que vivir en este siglo;
• para que tu alma sea por el cielo salva, y no condenada al infierno por inmunda.
•                              Paz de Cristo