TÚ ERES EL PRIMOGÉNITO DE LOS MUERTOS RESUCITADO Y VIVES POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS, OH CRISTO

• Jesús, dijo: Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi vida, para volverla a tomar.
• Nadie me la quita, sino que yo de mí mismo la pongo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar. Este mandamiento recibí de mi Padre. 
• Oh mi Cristo, la eternidad sustenta tu sagrado altar.
• Y al derramar la sangre del nuevo pacto en la cruz del Calvario; será en el cumplimiento del tiempo, de salvación a la amada Iglesia, que es el cuerpo de tu santísimo linaje.
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• Jesús, avisa: Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis sobrellevar.
• Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir. 
• Oh Rey de la gloria, tu encriptada forma de hablar,
• les hace entrever un grandioso plan que han de compartir. 
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• Jesús, enseña: No os toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad; pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.
• Y habiendo dicho estas cosas, viéndolo ellos, fue alzado, y le recibió una nube que le oculto de sus ojos. 
• Oh Cristo Jesús, tu venida de manera vertiginosa se nos acerca.
• Y cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria y todos los ángeles con él, entonces se sentará en su trono de gloria, y serán reunidas delante de él todas las naciones; y apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos.
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•  Jesús, asevera: E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas. 
• Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria. 
• Y las almas santas de lo alto serán investidas,
• que son las que han dado, oh Señor de señores, el sagrado testimonio de tu memoria.
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• Oh Sumo Redentor, 
• la salvación es por fe.
• Fruto del Espíritu es el amor;
• y el que lo ofrenda en su eterno nombre, bienaventurado es.
•                         Paz de Cristo