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viernes, 31 de enero de 2020

NO HAY GLORIA, SINO EN CRISTO

Reconocer a Cristo en tu vida,
es ser hacedor de su Palabra.
Has de sufrir hasta la sangre toda ignominia;
porque Él es el dueño de tu alma.

No seas sabio en tu propia opinión;
ni te apoyes en tu propia prudencia. 
Qué toda buena dádiva y todo don perfecto, den entendimiento a tu corazón.
Y, oh Cristo Jesús, seré un adorador en espíritu y en verdad de tu gloriosa presencia.

La tibieza del conformismo,
obra en contraposición de arrebatar la gloria. 
Ten piedad, Oh Altísimo, 
y edifica en mí la inmarcesible victoria.

El gozo máximo del Señor Jesucristo,
tuvo lugar; cuando momentos antes de expirar en la cruz del Calvario, pronunció la gloriosa frase: Consumado es.
Y es que, dar cumplimiento a la voluntad del Padre, fue su ineludible propósito;
porque no en vano, es el autor y consumador de la fe.

Si te glorías, gloríate en el Señor;
porque en tu propia gloria, no hay gloria.
Y vístete con el vínculo perfecto del amor,
para ser genuino testigo de su sagrada memoria.
                        Paz de Cristo 
        






jueves, 30 de enero de 2020

1 JUAN 4:6 EN CRISTO

Nosotros somos de Dios; el que conoce a Dios, nos oye; el que no es de Dios, no nos oye. En esto conocemos el espíritu de verdad y el espíritu de error.
Tu voz, oh Cristo, es de un timbre sublime.
En su melodía de amor,
se escucha su sagrada verdad, que de gracia el corazón circunciso recibe. 

La Palabra, oh Señor Jesús, 
con su onda Cristocéntrica abarca el universo.
Y tal es el resplandor de su majestuosa luz,
que penetra hasta en lo más recóndito el doble filo de su incisivo verso.

Oh Señor Jesucristo, tu sangre derramada en la cruz del Calvario,
fue el precio que pagaste, para libertar a cada alma del pecado.
Y ese lacerante flagelo, lo asumiste voluntariamente en tu celestial santuario;
convirtiendo así al ser inicuo que en tu nombre creyere en bienaventurado.

Aun tocando fondo, oh Cristo Jesús, con tu redentora muerte,
la humanidad sigue mostrando su dura cerviz.
Y en su indolencia persiste,
con un sórdido e inmundo cariz.

Oh Rey de reyes, 
Tú conoces todas y cada una de las máscaras del fariseo.
Y se mueve en la farsa de ser merecedor de tus gloriosos bienes;
pero, oh Señor de señores, antes de que salga de su boca,  Tú conoces la mentira encubierta de su fatuo pensamiento.

Oh Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, 
Tú eres muy celoso de tu gloria. 
Omnipotente, omnipresente y omnisciente es el Santo Espíritu;
y su infalible balanza, únicamente concederá la salvación a los corazones en victoria.
                       Paz de Cristo 












miércoles, 29 de enero de 2020

MARCOS 6:56 EN CRISTO

Y dondequiera que entraba, en aldeas, ciudades o campos, ponían en las calles a los que estaban enfermos, y le rogaban que les dejase tocar siquiera el borde de su manto; y todos los que le tocaban quedaban sanos.
Oh Rey de reyes, de tu sagrado manto salía poder.
Nada era imposible para que fueran curados,
los que en tu nombre, oh Señor de señores, pudieron creer.

Oh Cristo Jesús, 
el resplandor de tu manto alumbraba la inmensidad  del universo.
Era tan radiante su luz,
que cautivó al errático e irreverente  inconverso.

Anatema es toda substracción de la propiedad ajena;
y el castigo de Jehova, asolaba al causante de tal oprobio.
Caer en manos del Dios vivo es cosa horrenda;
porque en su ira, no encuentras desagravio.

El principio de la sabiduría es el temor de Jehova, dice la Sagrada Escritura.
Y también: Qué Jehová es lento para la ira y grande en misericordia.
Por el arrepentimiento y el bautismo en el nombre de Jesucristo, te son perdonados todos los pecados.Y eres una nueva criatura; porque lo dispuso así en su eterno santuario el Rey de la gloria. 

Oh Cordero inmolado, en tu sacrificio en la cruz del Calvario,
diste la inconmensurable medida de amor por la inicua humanidad.
Y porque la muerte no te pudo retener, oh Señor, en tu sagrado sudario;
hoy, predicamos hasta lo último de la tierra el Evangelio de la eterna verdad.
                          Paz de Cristo 



martes, 28 de enero de 2020

PROVERBIOS 30:12 EN CRISTO

Hay generación limpia en su propia opinión, si bien no se ha limpiado de su inmundicia.
La irregenerada iniquidad se mimetiza en el alma.
Persistente en su asechanza el angel de luz no nos deja ver su entenebrecida malicia,
que es contraria a la Palabra.

Sí, porque podremos oír de continuo la Sagrada Escritura;
pero aun así el corazón se muestra endurecido.
Y, oh Señor, tu admirable luz no la percibe su fatua espesura,
que en el abismo de sus concupiscencias sigue sumido.

Las ancestrales reminiscencias pecaminosas,
son un lastre impenitente. 
Oh Cristo Jesús, Tú viniste a deshacer las obras del diablo, que envilecen nuestras vidas por ser tan perniciosas.
Derrama de tu gracia, para transformar la maldad en bondad del ser irreverente.

Tuyo es el poder y la gloria, 
oh Señor Jesucristo. 
Invocad su nombre en victoria,
y se derramará sobre toda carne la verdad del Santo Espíritu. 

La salvación es individual,
oh Omnipotente Salvador. 
Conságrame en la perfecta senda celestial,
y moraré en la eternidad de tu majestuoso amor.
                          Paz de Cristo 








lunes, 27 de enero de 2020

ISAÍAS 55:10, 11 EN CRISTO

Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir, y da semilla al que siembra, y pan al que come, así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié.
Aun lo insensato del ser humano, oh Rey de reyes, se beneficia sin ningún pudor de tu creación.
No asumimos la efímera arrogancia del que se fue;
porque el engaño se multiplica exponencialmente en el corazón.

Jesús, dijo: El espíritu es el que da vida; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida; la carne para nada aprovecha.
Ímprobo es nuestro esfuerzo, por sobredimensionar los tesoros terrenales.
Has de saber, que toda vanidad se torna en endecha.
Y que el clamor espiritual se traduce en eternos bienes celestiales.

Oh Cristo Jesús, en el origen de tus hechos, 
se perpetúa la perfección.
Sobrenatural es la causa efecto de los universales prodigios.
Y, oh Señor, suples sin medida nuestra precaria comprensión,
con tus grandiosos e inescrutables designios. 

Pensamiento de eternidad es la Palabra,
y siempre guarda un inverosimil propósito.
En el santuario eterno, oh Sumo Hacedor, la concebiste majestuosa,
para que la gloria fuera su inexpugnable destino.

La Biblia ha sido inspirada, desde Genesis hasta Apocalipsis, por el Santo Espíritu.
Y hasta la última jota se cumplirá.
Confiamos en tu infinita misericordia, oh Todopoderoso Señor Jesucristo,
porque únicamente con el resplandor de tu luz admirable nuestra alma se salvará.
                           Paz de Cristo 

















domingo, 26 de enero de 2020

COMPLETOS EN CRISTO

Oh Cristo, Tú suples toda vicisitud indescifrable,
que pueda acaecer en nuestra vida.
Y es que, nos sustenta la revelación de tu Palabra, que discierne lo inefable;
y de toda impostura sórdida nos guarda.

¿Qué esconde el corazón del hombre?
Nadie lo sabe, excepto el Señor Jesucristo.
La Palabra hará justicia, oh Alto y Sublime,
que es la espada del Santo Espíritu.

La Biblia dice: Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.
No existe ninguna posibilidad de evitar su control. 
Nuestro corazón será pesado por su balanza de infalible precisión santa.
Y preservará la vida del ser humano, segando cada segundo las letales sombras del seol.

Oh Señor Jesús, tu omnisciencia, omnipotencia y omnipresencia,
han hecho habitable un planeta ignoto en el universo. 
Y a la irreverente humanidad, oh Hijo del Hombre, le predicaste las buenas nuevas de salvacion eterna.
Sobrenatural, oh Rey de la gloria, fue tu ministerio público en la tierra. Y antes de subir al cielo,
nos encomendaste la misión, de anunciar tu santísimo Evangelio a toda alma inconversa. 

Jesús, dijo: Si vosotros permaneciereis en mi Palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad y la  verdad os hará libres.
Y también: El que cree en mí, aunque este muerto vivirá.
Partimos de tu santuario eterno, oh Sumo Alfarero. Y todos somos vasos de barro de hechuras frágiles;
pero solo el que crea, completo será en tu nombre. Y siempre que permita ser moldeado por tu excelsa diestra, el umbral de la eternidad gloriosa traspasará.
                             Paz de Cristo 















sábado, 25 de enero de 2020

JOB 19:26, 27 EN CRISTO

Y después de deshecha esta mi piel, en mi carne he de ver a Dios; al cual veré por mí  mismo, y mis ojos lo verán, y no otro, aunque mi corazón desfallece dentro de mí.
La vanidad sojuzga al ser humano; pero cuando la muerte se convierte en luz o sombra, es el momento del no retorno.
Porque el espíritu vuelve a Dios; y parte de ti,
para descubrir el cielo o el infierno.

Creer en Cristo, 
es la convicción profunda de que Él es tu Señor y Salvador.
Y nada se oculta a la verdad del Santo Espíritu;
porque en su sagrada balanza, pesa cada micra de tu amor.

¿Está siendo tan genuflexa nuestra rodilla,
como para agradar hasta lo sumo a nuestro Cristo Redentor?
¿O tal vez, en nuestra alma la herrumbre y la polilla,
hayan diezmado el inicial y glorioso clamor?

La prueba es el mayor grado de inflexión,
que nos diferencia y determina en Cristo Jesús. 
Y es que, en la obscuridad de nuestro afligido corazón,
se hace incontrovertible la victoria, oh Señor, con el resplandor de tu majestuosa
 luz.

En el Seol no podrás alabar al Rey de reyes,
que con su preciosa sangre derramada en la cruz del Calvario, te dio gracia.
Sé el siervo que sin desmayo a sus pies te postres,
para que con la misericordia de su perdón, sea tu alma salva.
                               Paz de Cristo 







jueves, 23 de enero de 2020

LA ROSA, FRAGANCIA PERFECTA EN CRISTO

Sublime fragancia emana la rosa,
desde el santuario eterno.
Oh Cristo, su creación es tan hermosa,
que cautivó al tercer cielo.

Sí, porque desde antes de la fundación del mundo,
escogiste a tu amada Iglesia, oh Señor, sin arruga y sin mancha.
Y cuando agonizaba en un estado moribundo,
la transformaste en tu esposa bella y santa.

¡Consumado es! Oh Cristo Jesús, 
fue tu gloriosa exclamación, momentos antes de expirar en la cruz del Calvario.
Y, oh Cordero inmolado, el poder de tu majestuosa luz, 
nos dio gracia  para hollar el lugar santísimo, al rasgarse de arriba abajo el velo del sagrado tabernáculo. 

Oh Fiel y Verdadero, 
la estela de tus huellas indelebles seguiremos hasta la eternidad.
Porque hasta el dia postrero,
ha de ser lámpara a nuestros pies y lumbrera a nuestro camino, la verdad.

Oh Señor Jesucristo, 
Tú eres el autor y consumador de la fe. 
Y este don no es nuestro, sino del Santo Espíritu;
porque todo le es posible, al que la gloria del Salvador ve.
                        Paz de Cristo 
         



miércoles, 22 de enero de 2020

MARCOS 11:23, 24 EN CRISTO

Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudaré en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho. Por tanto, os digo que todo lo que pidieréis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá. 
Persistid con fe en vuestro propósito, clamando con toda oración y súplica, para que el poder de Cristo Jesús se manifieste en vuestras vidas.
Y la sed espiritual doblegará,
a lo que dabas por imposible, como sobrenaturales dádivas.

¿Habrá algo imposible para Dios?
Y es que, cuando mengües hasta la ínfima expresión, te será revelado el poder del Altísimo.
Porque recibirás hasta el ciento por uno multiplicados;
si has creido en el Todopoderoso, con la
la autoridad del que se ha guardado en su nombre, negándose a sí mismo.

Solo hay un Sumo Hacedor, 
y hemos de exaltarlo con la  máxima solemnidad y reverencia.
Vestíos con el vínculo perfecto del amor, 
y seréis llenos de su majestuosa presencia.

Y al volver en sí, oh Rey de reyes,
nos abrirás el entendimiento.
Porque de gracia son todos tus prodigiosos bienes, 
que nos ha concernido la magnificencia del Fundamento.

La unción es consubstancial, oh Señor Jesucristo, 
a la sabiduría de lo alto.
Y por la verdad del Espíritu, 
nos sobrevino el conocimiento, oh Omnipotente Salvador, de que de Israel eres el Santo.
                               Paz de Cristo 




martes, 21 de enero de 2020

PROVERBIOS 3:3,4 EN CRISTO

Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad; átalas a tu cuello, escríbelas en la tabla de tu corazón; y hallarás gracia y buena opinión ante los ojos de Dios y de los hombres.
Has que prevalezca la piedad en tu vida.
La altivez es contraria a los humildes;
que en Cristo, dan provisión de la buena dádiva.

Te ceñirás la sagrada verdad, 
que es únicamente interiorizada por el atalaya del Señor Jesucristo. 
Porque en su pureza edifica eternidad,
con el poder del Santo Espíritu.

En tu corazón has de esculpir la santidad,
que te hará reconocer las sobrenaturales huellas de Cristo Jesús.
Y desterrarás toda vanidad,
al descubrir en su nombre la gloriosa plenitud.

Tu ajusticiamiento, oh Cristo, en la cruz del Cavario, 
es la obra de amor más  inconmensurable, de la que se derrama tu majestuosa e inmarcesible gracia.
Inagotable manantial es su magnificente santuario,
que rebosa de paz el alma.

Oh Cordero inmolado, pronunciaste tu universal perdón desde la cruz, sobre los malvados y sanguinarios seres humanos.
Y se hizo manifiesto el misterio de la piedad.
Oh Soberano Salvador, tu preciosa sangre derramada, justificó con su gracia la execrable iniquidad de nuestras manos.
Y, oh Rey de la gloria, los que tenemos fe en la salvación, veremos tu rostro; porque hemos sido revestidos de tu eterna inmortalidad.
                         Paz de Cristo 


















ROMANOS 6:22 EN CRISTO

Mas ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación, y como fin la vida eterna.
Y es que del pecado, en el bautismo, hiciste sepultura.
Porque en Cristo tienes santidad plena,
al ser en Él una nueva criatura.

Inexistente ha de ser toda lucha contra el pecado, 
desde tu resurrección en Cristo Jesús.
Y regocíjate por ser bienaventurado;
porque ya no eres de las tinieblas del mundo, sino un hijo de la luz.

¡Sí, tuviste un arrepentimiento genuino en el Señor Jesucristo!
¿O tal vez, has dado lugar a la tibieza?
Si esto fuera así, póstrate con el corazón contrito y humillado a los pies del Altísimo;
porque al que se quebranta en espiritu y en verdad, el Señor de señores no desprecia.

No incurras nunca más, en dar mérito al maligno.
Desde este momento y para siempre, dale toda la gloria al Rey de reyes.
Qué tu vida discurra con firmeza por el angosto camino, 
y serás galardonador de sus gloriosos bienes.

¡Hazlo todo en el nombre de Jesús!
Vivífica tu corazón con toda buena dádiva y todo don perfecto, que es la sabiduría de lo alto.
Ten la mente de Cristo, para alcanzar la estatura del varón perfecto en su sobrenatural plenitud.
Y no por obras, para que nadie se gloríe, sino por gracia serás salvo.
                              Paz de Cristo 








lunes, 20 de enero de 2020

SALMO 47:5 EN CRISTO

Encomienda a Jehová tu camino, y confía en Él; y Él hará.
La duda es irreverente ante su indefectible fidelidad.
Él en su excelsa diestra nos guardará, 
por ser atalayas de la verdad.

Oh Cristo, la enjuta vereda,
propicia santificación.
Aun si a tu espíritu se le veta,
sus alas batirá elevándose con el viento de Sion.

La provisión eterna,
revelacion es del cielo.
Oh Cristo Jesús, el Espíritu de la Sagrada Palabra son los dos filos de su espada que corta y penetra,
hasta ser cumplido su sobrenatural propósito.

Las 70 veces 7 del preceptivo perdón a tu hermano, que predicó el Señor Jesucristo, 
fueron una absoluta insignificancia; cuando confrontado con su abominable sacrificio en la cruz del Calvario, el Rey de reyes, dijo: Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen.
Oh Cordero inmolado, Tú eres el único digno;
y son únicamente tus verdaderos adoradores los que sobre las tinieblas prevalecen.

Oh Omnipotente Redentor,
tu preciosa sangre derramada a los que creen e invocan tu nombre, de gracia les ha dado salvación.
Pero, para morar en tu gloria, hemos de amarnos como tu nos amaste, oh Sumo Salvador, 
a través del eterno perdón.
                           Paz de Cristo 
                      


















domingo, 19 de enero de 2020

EL NIÑO, GLORIA EN CRISTO

Has de cambiar tu obscuridad,
para ser, sin medida, luz en Cristo.
Y volver a la inocente verdad,
que te permitirá traspasar el umbral del reino de los cielos; si adecúas tu sentimiento al de un niño, conforme a su espiritu.

Oh Soberano Señor, 
de tu glorioso nombre, siempre será dependiente nuestra alma.
Porque, oh Rey de la gloria, gracia recibe de tu amor,
el que con candor ama.

Oh Señor Jesucristo, Tú asemejas la candidez de un niño,
al reino de gloria.
Y todo hombre ha de tener este mandato cumplido,
para que el paraíso sea su eterna victoria.

Nunca serás tropezadero del siervo que creyere en Cristo Jesús; 
porque sería el equivalente a un niño en su pureza.
Y tendrías tan desmesurado castigo sobre la testuz,
que no podrías levantar más tu cabeza.

No hagas caso omiso de la enseñanza del Alfa y la Omega;
y será grande en misericordia, y lento para la ira.
Caer en manos del Dios vivo es cosa horrenda.
Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, que va en aumento hasta consumar un perfecto día.
               Paz de Cristo 















sábado, 18 de enero de 2020

A TI SEA LA GLORIA, OH CRISTO

Oh Cristo, Tú eres el Santo de Israel,
y el único digno de gloria.
Y toda la adoración sea para Él, 
porque en la cruz del Calvario nos dio la eterna victoria.

Oh Cordero inmolado, 
aún se oye el eco del escarnio y vituperio en tu abominable sacrificio.
¿Por qué fuiste ajusticiado;
si eres el autor de la vida, y predicaste el glorioso Evangelio que desterró del ser humano todo maleficio?

¡Ay de la humanidad olvidadiza, que hace desdén, oh Señor, de tu majestuosa sangre derramada!
¿Quién conoce o se acuerda del nuevo pacto de la gracia?
Porque desde tu piadosa y agónica mirada,
nos concediste el perdón con el alma.

Y, oh Rey de la gloria, nos redimiste del pecado y lo justificaste;
clavando en la cruz todas las actas del diablo, que de nuestra iniquidad nos inculpaban.
Pero de tu sublime misericordia, oh Omnipotente Redentor, nadie quiere acordarse.
¿Será por qué aún no se han arrepentido los que te insultaban?

La Biblia dice: Así la fe viene por el oír, y el oír, por la Palabra de Dios.
Y también: Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
Jesús, dijo: No os regocijeis de que se os sujeten los demonios, sino de que vuestro nombre esta escrito en los cielos.
¡Y es que de gracia somos tus hijos, oh Todopoderoso Salvador!
                     Paz de Cristo 


















viernes, 17 de enero de 2020

LA PALABRA, ETERNA LIBERTAD EN CRISTO

Jesús, dijo: Si vosotros permaneciereis en mi Palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
Adolecemos de un precaria revelación de la Sagrada Escritura. 
La fe es un don, oh Rey de la gloria, que Tú regalas a los hombres;
para alcanzar la estatura del varón perfecto, y ser en tu nombre una nueva criatura.

El principio de la sabiduria es el temor de Jehová, dice la Biblia.
No exite ni un solo segundo de nuestra vida, en el que Dios no manifieste su omnipresencia.
En su santuario eterno el Sumo Hacedor te ha creado. Y le ha dado aliento de vida,
a tu espíritu, alma y cuerpo de excelencia.

La singularidad del ser humano,
reside en sus rasgos únicos y diferenciados.
Oh Todopoderoso Alfarero, en tu excelsa diestra somos vasos de barro, 
que estás moldeando hasta la espiritual perfección, para ser bienaventurados.

Tu libertad ha de ser consubstancial al majestuoso poder de la Palabra;
y estar concernida en su sagrada obediencia.
Porque la salvacion del alma,
será propicia, oh Altísimo, con la sobrenatural llenura de tu presencia.

Si anhelas ver al Fiel y Vedadero;
sé santo, porque El es santo.
Y que nada te sea tropezadero;
aun cuando el sendero hacia la gloria te sea más contrario y angosto.
                          Paz de Cristo 







SALMO 145:18 EN CRISTO

Cercano está Jehová a todos los que le invocan,
a todos los que le invocan de veras.
Ésta es la concordancia absoluta en Cristo.
Y se cumple inexorablemente en los que en Él esperan;
porque se regocijan en el Santo Espíritu.

Qué tu firmeza en el Omnipotente,
no permita la hipocresía.
Fundaméntate en su gracia magnificente,
para ser el aguerrido testigo ante la apostasía.

Jesús, dijo: Este pueblo de labios me honra; mas su corazón está lejos de mí. Pues en vano me honran, enseñando como doctrina mandamientos de hombres.
Y también: El que no es conmigo, contra mí es; y el el que conmigo no recoge, desparrama.
Lo irrefutable quiso demostrar el Señor de señores;
y es si crees o no crees en su Palabra.

La impostura, oh Cristo Jesús, 
se rodea del oprobio de una densa tiniebla.
Y la verdad, oh Señor Jesucristo, que es tu luz,
con gran dificultad la atraviesa.

La Biblia dice: Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de Él.
El Señor Jesús, hizo un pronunciamiento sobrenatural, para perseverar en su Palabra: Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil.
Toda nuestra confianza está puesta en ti, oh Sumo Hacedor, porque eres el Justo y Fiel.
Y, oh gran Yo Soy, Tú te manifestaste en carne, para deshacer toda obra fútil.
                    Paz de Cristo 
                   












miércoles, 15 de enero de 2020

QUÉ EN MI ACTITUD, SEA SIEMPRE ALABADO TU NOMBRE, OH CRISTO

Qué no sea nunca indiferente, por acción o por omisión,
tu alabanza a Cristo. 
Purifica con desvelo tu corazón,
y verás al Rey de reyes, con la verdad del Santo Espíritu.

Oh Cristo Jesús, 
en la parte no redimida del ser humano, persiste la inercia del mundo. 
Haz que en tu alma resplandezca su admirable luz,
para santificar en el nombre del Alfa y la Omega, tu ancestral estado moribundo.

Existe una velada actitud de cobardía,
que le sigue dando abundante merito al maligno.
Has de doblar tus rodillas, ante tal osadía;
y con el corazón contrito y humillado, quebrantarte a los pies del Señor Jesucristo.

Has de saber, que toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto.
No hagas más concesiones a lo terrenal.
Tú eres un hijo del que de Israel es Santo;
y tu linaje es del reino celestial.

Entonces Jesús dijo a sus discipulos: De cierto os digo, que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos. Otra vez os digo, que es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios. Sus discípulos, oyendo esto, se asombraron en gran manera, diciendo; ¿Quién, pues, podrá ser salvo? Y mirándolos  Jesús, les dijo: Para el hombre esto es imposible; mas para Dios todo es posible.
Sabemos, oh Señor, que en tu Palabra se sustenta el infinito.
Y que en los cielos tu poder es tan inconmensurable,
que anhelo ver en el firmamento, oh Rey de la gloria, mi nombre escrito.
                                Paz de Cristo 








martes, 14 de enero de 2020

JUAN 11:35 EN CRISTO

Jesús lloró.
Y en su santuario eterno el Sumo Hacedor,
del majestuoso cetro regio se despojó, 
para ser el Hijo del Hombre y nuestro Omnipotente Redentor.

Oh Padre eterno, en un establo fue tu nacimiento, 
y lo transformaste en el glorioso templo del  Santo Espíritu.
Tu poder descendió del firmamento; 
y el que en tu nombre creyere será salvo, oh mi Señor Jesucristo. 

Siempre te persiguió la abyecta vileza,
oh Cristo Jesús.
El inicuo en su execrable tibieza,
nunca descubrirá, oh Señor, que Tú eres del mundo la luz.

Oh Rey de reyes y Señor de señores, 
te escarnecieron y vituperaron en un martirio de cruz abominable.
Cuando tu ofrenda de misericordias y favores, 
eran el loor de la eternidad inefable.

Oh Fiel y Verdadero,
tu corazón lloró en los desiertos lágrimas de sangre.
Pero la infalible balanza, pesará los corazones en el día postrero. 
Y abrirás la gloria, oh Todopoderoso Salvador, al que negándose a sí mismo, haya consagrado cada segundo de su vida con el ferviente deseo de adorarte.
                         Paz de Cristo 













lunes, 13 de enero de 2020

ISAÍAS 5:20 EN CRISTO

¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!
A los que creen en Cristo Jesús, no les sobreviene duda, ni confusión.
En el recto camino, no ha lugar lo improvisado;
todo le es de meridiana transparencia a las consagradas tablas del corazón.

La tibieza nunca ha estar en tu horizonte.
Según el texto bíblico,
has de ser frío o caliente.
Y así, del Señor serás su verdadero hijo.

En el nombre de Jesús,
como un resorte ha de ser tu decisión.
La desvirtuada fe es contraria al hijo de luz, 
por ofrecer resistencia a la genuina unción.

En las pruebas, oh Señor Jesucristo, 
aprecias la solemnidad e insolemnidad del alma, y el devenir de su salvación o condenación.
Ten siempre presente, que Dios pesa tu espíritu, 
con sobrenatural precisión.

Nuestro Señor y Salvador,
ha hecho todo perfecto.
Es el alto y sublime que habita la eternidad. Él es amor.
Y el Soberano Creador del universo.
                         Paz de Cristo 







domingo, 12 de enero de 2020

TU RESURRECCIÓN NOS DIO VIDA, OH CRISTO

Oh mi Cristo, 
nadie tenía conocimiento de que en tu muerte había vida, y vida en abundancia.
Y el Espíritu de resurrección se hizo nanifiesto en tu santísimo sepulcro;
porque la muerte no te pudo retener, al proclamar sobre ella la inexorable victoria de majestuosa excelencia. 

En tu sagrada sepultura, oh Cristo Jesús,
los ríos  de agua viva anegaron el Hades.
Y con el resplandor de tu admirable luz,
los yermos desiertos fueron exuberantes rosales.

La inmunda forja del herrero,
con ascuas incandescentes selló la incredulidad del alma desolada.
Y en el despropósito de su desvelo,
era inexistente la esperanza bienaventurada.

Oh Omnipotente Redentor, 
tuvieron que palpar tu llaga; qué es la que sanó nuestras enfermedades, tus propios discípulos.
Tal era tu caudal de amor,
que en el universo tus bendiciones desbordaron los santuarios eternos.

No hay otro Dios fuera de ti.
Oh Señor Jesucristo, Tú eres el Todopoderoso Salvador.
Y con tus verdaderos siervos estarás hasta el fin;
al ser de la vida y de la fe, el autor y consumador.
                         Paz de Cristo 










sábado, 11 de enero de 2020

LA INDIFERENCIA, OPROBIO EN CRISTO

Despójate de la indiferencia,
que es una execrable máscara del oprobio en Cristo.
Y cíñete el traje de excelencia, 
que es la verdad del Santo Espíritu.

Oh Señor Jesucristo, Tú del mundo eres la luz;
y transformas el alma entenebrecida, revistiendola con tu resplandor.
Oh Rey de reyes, en el vínculo perfecto de tu plenitud,
se manifiesta el eterno amor.

Tu transparencia ha de ir de aumento en  aumento, desbancando toda opacidad, 
hasta hacer como la luz de la aurora que el día sea perfecto.
O sino elevarás un palmo tu estatura para  ver la eternidad,
clamando en todo tiempo al Fiel y Verdadero.

La vida es muy efímera;
no la malgasteis en la fatua obscuridad.
Buscad en Cristo Jesús la gloria postrera,
que es la angosta senda de la piedad.

Oh Sumo Salvador, lámpara es a mis pies tu Palabra, y lumbrera a mi camino.
Todas las cosas están  desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.
Escóndeme en tu excelsa diestra, oh Altísimo,
para que tu gozo en mi alma, sea la inexpugnable fortaleza.
                        Paz de Cristo 












PROVERBIOS 21:2 EN CRISTO

Todo camino del hombre es recto en su propia opinión; pero Jehová pesa los corazones.
El ser humano se ve limitado por su arrogancia.
Y  nunca podra evaluar sus fatuas acciones,
por la secular ignorancia.

La sabiduria de lo alto,
te la da invariablemente el Señor Jesús. 
Pero has de pedírsela sin dudarlo,
para recibirla en plenitud.

Confía hasta el fin en el Rey de reyes y Señor de señores;
porque Él es el único fiel.
La belleza perfecta, en tu vida, son sus misericordias y favores.
Cada segundo de tu existencia, has de adorar al gran Yo Soy. Y con el quebrantamiento de espíritu, póstrate sin tiempo a los gloriosos pies del Santo de Israel. 

La Biblia dice: Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
El Todopoderoso y Salvador Jesucristo, no hace acepción de personas. 
Oh Cordero inmolado, por todos los pecadores, en la cruz del Calvario,  consumaste el sacrificio de expiación con excelso amor,
para redimir y justificar a las entenebrecidas almas.

Sin embargo, la unción que te ofrece Cristo Jesús, 
es que tomes tu cruz, guardando pulcra semejanza con la de su crucifixión.
Y al desterrar la densa tiniebla, resplandezcas en su admirable luz,
que es la genuina salvación.
                              Paz de Cristo 













viernes, 10 de enero de 2020

GÁLATAS 2:20 EN CRISTO

Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.
El acto de amor más insondable, oh Cristo Jesús, es in aeternum tu sacrificio en la cruz del Calvario. 
Constituirte en semejanza de carne de pecado, oh Señor, fue tu fin,
para al pecador abrir la puerta de tu eterno santuario.

Tu discipulo, oh Señor Jesucristo, 
es el que testifica tu inmolación en la cruz;
y a su vez la toma en su espíritu,
anunciando, oh Omnipotente Redentor, que del mundo eres la luz.

Oh Señor Jesús, sin creer en tu nombre, 
nadie será salvo; y padecerá vergüenza y confusión por la eternidad en el infierno.
Aún esto no es óbice,
para que se erija la fe en el inconverso.

Vasos de barro somos en manos del Sumo Alfarero;
unos para honra y otros para deshonra.
Oh Fiel y Verdadero, 
tus verdaderos siervos, rendidos a tus pies, por los siglos te ofrendaremos loas de gloria.

Si tu propósito final es la salvación,
has de tener la mente de Cristo. 
Y que en el pálpito de tu corazón, 
mane la vida del Santo Espíritu. 
                       Paz de Cristo 

jueves, 9 de enero de 2020

HEBREOS 12:4 EN CRISTO

Porque aún no habéis resistido hasta la sangre, combatiendo contra el pecado.
Oh mi Cristo, a precio de sangre nos compraste.
Imposible hubiera sido pagar esta inconmensurable deuda; si nuestros delitos y pecados no hubieras redimido y justificado
con la gracia, que es el nuevo pacto de tu preciosa sangre, oh Cordero inmolado. Y que sobre tus hijos inmerecidamente derramaste.

Oh Cristo Jesús, Tú nos abriste el entendimiento, 
cuando por el don de la fe supimos, que al creer en tu nombre seriamos salvos en el día postrero. 
Y es que, en tu promesa ha de obrar nuestro perfecto cumplimiento,
oh Fiel y Verdadero.

Irreprensibles hemos de ser en la obediencia a tu Palabra, 
oh Señor Jesucristo. 
Porque nada te es oculto, oh Omnipotente Redentor, del que sin medida te ama
en el Espíritu. 

Si tu vida está asida al Rey de la gloria, 
sin reproche has de darla por Él. 
La denodada lucha contra el pecado, ha de ser nuestra santísima victoria; 
y la que nos ha consagrado, oh Señor, en tu refugio fiel.

Jesús, dijo: Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas al alma no pueden matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno.
Sí, porque el Todopoderoso Salvador Jesucristo, tiene las llaves del infierno y del Hades.
Y Él es el que te santificará desde el cielo;
si hasta el fin perseverares.
                          Paz de Cristo