Powered By Blogger

domingo, 5 de enero de 2020

EL PECADO, ABOMINACIÓN EN CRISTO

El estigma del pecado,
es la ignominiosa prisión de la humanidad.
Y la mayor abominación, oh Cristo, que del ser humano se ha enseñoreado,
para vetar sus anhelos de eternidad.

En la naturaleza de pecar,
se ve inmersa la acción concupiscente del hombre inicuo.
Ábrele, oh Cristo Jesús, el entendimiento de amar,
para dar por zanjado el execrable oprobio de lo ilícito.

A todo ser recién nacido, oh Señor Jesucristo,
le contempla el candor de la inocencia. 
Si tu obra maestra la has creado conforme a la imagen y semejanza de tu Santo Espíritu,
¿por qué se transforma a lo largo de su vida  en tan despiadada obsolescencia?

El alma vestida de lino, que son las acciones justas de los santos,
morará en la gloria eterna.
Oh Fiel y Verdadero, a ti clamamos,
para ser llenos de tu gracia plena.

Porque nunca haremos méritos para optar a la salvación,
pidámosle al Omnipotente Redentor, que nos conceda doble unción de su Espíritu.
Y recibiremos la sobrenatural bendición,
de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.
                     Paz de Cristo 










No hay comentarios:

Publicar un comentario