- Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
- Pues mucho más, estando ya justificados en su sangre, por él seremos salvos de la ira.
- Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por su vida.
- Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en Dios por el Señor nuestro Jesucristo, por quien hemos recibido ahora la reconciliación.
- Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.
- Pues antes de la ley, había pecados en el mundo; pero donde no hay ley, no se implica de pecado.
- No obstante, reinó la muerte desde Adán hasta Moisés, aun en los que no pecaron a la manera de la transgresión de Adan, el cual es figura del que había de venir.
- Oh mi Cristo, tu excelso amor, en tu muerte y muerte de cruz, a día de hoy, deja a los obscenos del mundo obnubiladamente perpejlos.
- Y además, oh Rey de la gloria, con tu preciosa sangre derramada hiciste el nuevo pacto de la gracia.
- Porque no existe mayor privilegio, oh Cristo Redentor, que en tu muerte,sepultura y resurrección, nos dieras la gloriosa salvación eterna.
- Y es que, oh Santo, justificaste nuestras viles miserias, con tu indeleble y majestuoso perdón.
- Los espiritualmente moribundos de su inercia pecaminosa no se apartaron.
- Porque sin la ley todo era séptico y despiadado;
- pero la redención y justificación del Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, de todo el que creyó en su santo nombre, deshizo la perversa inmisericordia del diablo y le puso fin.
- Paz de Cristo
lunes, 25 de noviembre de 2024
ROMANOS 5:8-14 EN CRISTO
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