Powered By Blogger

miércoles, 12 de febrero de 2020

SALMO 127:1 EN CRISTO

Si Jehová no edificare la casa, en vano trabajan los que la edifican; si Jehová no guardare la ciudad, en vano vela la guardia.
¡Sí, concernidos estamos en el poder de lo alto!
Y ante la imposibilidad, oh Sumo Hacedor, de substraerse a tu excelsa diestra,
hemos de invocar tu presencia, oh Señor Soberano.

La Biblia dice: Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces.
Y también: El que cree en mí, aunque este muerto, vivirá.
Oh gran Yo Soy, de nuestra fe, únicamente Tú sabes los límites; 
y todo lo que con ella el alma edificará.

Oh Señor Jesucristo, Tú recriminaste a tus discípulos su incredulidad, después de haber resucitado;
y ellos fueron testigos de tus sobrenaturales milagros.
De tu gracia, oh Rey de la gloria, siempre dependerá el que a tu nombre se ha consagrado,
por haber recibido el nuevo nacimiento de los que habían de ser salvos.

Jesús, dijo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba. El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.
Asida ha de estar el alma, oh Señor, a tus pensamientos de eterna salvación.
Y porque de él mana la vida;
sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón. 

Oh Omnipotente Salvador, danos de tu sagrada provisión, 
para alcanzar la estatura del varón perfecto.
Y que sea tu glorioso tiempo, a la sazón,
el que nos abra la puerta del cielo.
                           Paz de Cristo 













No hay comentarios:

Publicar un comentario