De linaje Cristocéntrico,
es la semilla sagrada.
Y en la piedad del lugar santísimo,
se da genuina revelación de la Palabra.
Sal de la confusión,
que se manifiesta con irreverente indiferencia ante el mensaje poético de Cristo.
Sé fiel a la singular adoración,
que es transparente pureza del Santo Espíritu.
Siembra la simiente perfecta,
para que siegues la gloriosa miés sobrenatural.
Lucha y se valiente para impedir todo anatema,
que con su abominable tiniebla, no prevalecerá sobre la admirable luz celestial.
Busca en lo profundo de tu alma,
y llegarás a los grandiosos cimientos de la fe.
¡Jesús te ama!
Él no hace acepción de personas;
y del que persevere hasta el fin, galardonador es.
Los prodigios en el nombre de Jesús,
son la manifestación espiritual de lo espontáneo.
Resplandecer, oh Señor, en la solemne excelencia de tu plenitud,
es de tus discípulos la eternidad hecha deseo.
Paz de Cristo
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