LA IGLESIA, SIERVOS SANTOS EN CRISTO

• La Biblia dice: Sed, pues, imitadores de Dios como hijos amados. 
• Y andad en amor, como también Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios en olor fragante.
• Poned los ojos en Cristo, para ser verdaderos santos.
• Y que no os sea tropezadero la carnal inmundicia en ningún instante. 
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• La amada del Omnipotente Señor Jesucristo, 
• ha de estar siempre vestida de lino fino: con pureza de espíritu, sin arruga y sin mancha.
• Y en ella, se ha de distinguir la obediencia sobre el sacrificio;
• para ser impoluta e incorruptible, oh Señor, ante tu presencia. 
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• La Biblia enseña: Y: si el justo con dificultad se salva, ¿En dónde aparecerá el impío y el pecador?
• De modo que los que padecen según la voluntad de Dios, encomienden sus almas al fiel Creador, y hagan el bien.
• El punto de inflexión es el amor;
• y su gracia sustenta en el nombre de Jesús, al siervo santo y fiel.
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• Y también: ¿O no sabéis que los santos han de juzgar al mundo? Y si el mundo ha de ser juzgado por vosotros, ¿sois indignos de juzgar cosas muy pequeñas?
• ¿O no sabéis que hemos de juzgar a los ángeles? ¿Cuánto más las cosas de esta vida?
• Evitemos toda contienda, y seamos heraldos del piadoso desagravio, mostrando de corazón ilimitadas indulgencias;
• y nuestra alma, oh Rey de reyes, por tu excelsa diestra será bendecida.
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• La Biblia asevera: Por lo cual, levantad las manos caidas y las rodillas paralizadas; y haced sendas derechas para vuestros pies, para que lo cojo no se salga del camino, sino que sea sanado.
• Seguid la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. 
• Oh Todopoderoso Señor Jesucristo, anhelo ser tu siervo bienaventurado,
• y palpar con el alma la gloriosa excelencia del amor.
•                      Paz de Cristo