ROMANOS 8:30,31 EN CRISTO

• Y a los que predestinó, a estos también llamó; y a los que llamó, a estos también justificó; y a los que justificó, a estos también glorificó.
• ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?
• Sí, en el santuario eterno, oh Señor, todo se consumó;
• porque somos de tu gloria hijos imperecederos.
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• Oh mi Cristo, la duda nos asalta,
• cuando en tu nombre no se afirma nuestra fe.
• ¿Por qué limitas con tu arbitrariedad su gloria inconmensurable y perfecta?
• No has entendido aún a traves de su Sagrada Palabra, que no hemos creido por vista, sino por lo que no se ve.
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• La Biblia dice: Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si hubiera cometido pecados, le serán perdonados. 
• Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho.
• Esta es la preciosa y precisa instrucción del Fiel y Verdadero, para ser bienaventurados.
• Oh Cristo Jesús, danos revelación del misterio de las Escrituras, que a nuestro espíritu permanece oculto.
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• Jesús, dijo: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto vivirá. 
• Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto?
• Oh Altísimo Señor Jesucristo, en la cruz del Calvario, Tú pusiste la vida y la volviste a tomar, para que en el incredulo, oh Rey de reyes, constatara tu gracia, 
• que al fin fue liberto.
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• No importa la vicisitud que en tu existencia acontezca;
• si el Santo de Israel vive en tu corazón 
• Porque ante lo más tenebroso, oh Alto y Sublime, harás que nuestra vida en tu majestuosa luz amanezca,
• para darnos eterna salvación. 
•                       Paz de Cristo