EL AMOR, MAJESTUOSO PODER EN CRISTO

• La Biblia dice: Y nosotros hemos conocido y creido el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor; y el que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él.
• Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero.
• El amor excede de todo conocimiento, cuando del Fiel y Verdadero es;
• y se erige como un insustituible e indoblegable heraldo de lo eterno.
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• Y también: El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactanciosos, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor, no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad.
• Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
• Su obediencia es tan inasumible para la humanidad,
• que por una enconada idiosincrasia, no podrá edificar unánimemente la santidad del sinnúmero de almas sobre la eterna gloria.
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• Jesús, dijo: Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros. 
• En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros. 
• Nada nos deparará más, que ser, oh Señor, en tu nombre gozosos;
• y que en el cielo figuren nuestros nombres escritos.
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• La paupérrima sabiduría  de nuestros ancestros,
• nos ha legado una obscura mentalidad.
• Y hemos de resistir hasta la sangre, ante todos los principados siniestros, 
• para salvaguardar nuestra Cristocéntrica verdad.
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• Aun en las penumbras de veleidades ambiguas,
• estaremos, oh Cristo Jesús, firmes hasta la muerte.
• Y venceremos en todas la batallas;
• si el Todopoderoso Rey de reyes y Señor de señores, en nuestras vidas está presente.
•                         Paz de Cristo 
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