HEBREOS 12:4-6 EN CRISTO

• Considerad a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar. 
• Porque aún no habéis resistido hasta la sangre, conbatiendo contra el pecado: y habéis ya olvidado la exhortación que como a hijos se os dirige, diciendo: Hijo  mio, no menosprecies la disciplina del Señor, ni desmayes cuando eres reprendido por él; porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo el que recibe por hijo.
• Que nadie en tu predicación, pueda a Jesús, obviar;
• siempre has de ser atalaya del Evangelio, ante el incircunciso. 
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• Oh Cristo, en la cruz del Calvario derramaste tu majestuosa sangre; 
• para que de lo recibido del pacto de la gracia, fuera propagado a la inmensidad del universo.
• Si tú eres un alma perdida, el Señor quiere salvarte;
• y que el paraíso, sea tu eterno aposento.
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• La Biblia dice: Porque misericordia quiero, y no sacrificio, y conocimento de Dios más que holocaustos.
• Consagraremos nuestras vidas, oh Altísimo Jesucristo, a tu adoración, y a orar postrados de corazón con loas a tu nombre.
• Aún para el cielo, no estamos desamparados;
• porque buscaremos tu rostro, y seremos de la gloria moradores para siempre. 
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• En la longanimidad se sustenta el siervo del Sumo Alfarero, 
• para perfeccionar su fragil vaso.
• Y así en el dia postrero, 
• recibirá el galardón de ser santo.
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• Todo esto; no antes de haber superado la prueba, en el nombre de Jesús, 
• que es tu cruz como maxima obediencia.
• Porque el resplandor de los hijos de luz,
• ha de brillar desde la eternidad y hasta la eternidad, con excelencia. 
•                            Paz de Cristo