LA PALABRA, SIEMBRA PERFECTA EN CRISTO

• La Biblia dice: Y percibió Jehová olor grato; y dijo Jehová en su corazón: No volveré más a maldecir la tierra por causa del hombre; porque el intento del corazón del hombre es malo desde su juventud; ni volveré más a destruir todo ser viviente, como he hecho.
• Mientras la tierra permanezca, no cesarán la sementera y la siega, el frio y el calor, el verano y el invierno, y el día y la noche.
• Oh Sumo Hacedor, nada se escapó a tu control, al buscar la bondad del ser humano en su provecho. 
• Y por tu inmensa misericordia, oh Jehová, sigue dando loas al nombre que es sobre todo nombre, el que de corazón se arrepiente.
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• Y también: He aquí vienen días, dice Jehová, en que el que ara alcanzará al segador, y el pisador de las uvas al que lleve la simiente; y los montes destilarán mosto, y todos los collados se derretirán.
• Las cosechas se desbordarán en fertilidad de grandiosa exuberancia. 
• Las lluvias tempranas y tardías se perpetuarán.
• Y, oh Rey de la gloria, tu excelsa diestra nos guardará en el eterno refugio de la sagrada abundacia.
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• Sembrar espiritualidad,
• es dar a conocer la Palabra. 
• En su majestuoso poder esta concernida la verdad,
• que es la senda del que ama.
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• La Biblia asevera: Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargűir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.
• Y también: Todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís. 
• Asomaos a la eternidad con la pureza del alma;
• porque para ser salvos, en Cristo Jesús vivís. 
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• Del santuario eterno proviene vuestra perfecta simiente;
• y no se perderá, si la sustentáis con la Sagrada Escritura. 
• Y si amas al Altísimo Señor y Salvador Jesucristo,  con alma, corazón y mente;
• confirmarás con todas tus fuerzas, que eres en Él una nueva criatura. 
•                          Paz de Cristo