Powered By Blogger

lunes, 31 de agosto de 2020

¿POR QUÉ LA HUMANIDAD NO TE AMA, OH CRISTO?

  • Tú eres el Omnipotente Señor y Salvador Jesucristo;
  • y tienes las llaves de la majestuosa gloria, y del infierno execrable.
  • ¿Será, que tanto hemos contristado al Santo Espíritu, 
  • que a nuestra alma hemos desvirtuado, hasta hacerla condenable?

  • Atribuirte, oh Sumo Hacedor, nuestro entenebrecido lastre vital,
  • es el fatuo pensamiento que acompaña al ser humano. 
  • No han dado ningún valor a tu manifestación carnal;
  • y siguen ignorando, oh Rey de reyes, que desde la eternidad y hasta la eternidad, posees el regio y universal báculo. 

  • Pensad en el inconmensurable amor, 
  •  que ha tenido por los perdidos el Todopoderoso Cristo Jesús. 
  • Nada ha superado su sacrificio en la cruz del Calvario, de fragante candor, 
  • y de sagrada e incomparable luz.

  • No bastó, oh Señor Jesús, el escarnio y el vilipendio de tu crucifixión. 
  • Y ser el primogénito de la muerte resucitado. 
  • La incredulidad y mentira a la sazón,
  • sustentan tu eterna salvación, como si su poder sobrenatural tuviera un origen adulterado. 

  • Jesús, dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. 
  • Si le conocieseis, también a mi Padre coneceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto.
  • Toda la obscuridad que te rodea, oh Alto y Sublime, la has transformado de principio a fin,
  • en la majestuosa e inmarcesible luz de tu Santo Espíritu.
  •                         Paz de Cristo 

No hay comentarios:

Publicar un comentario