HEBREOS 1:7-14 EN CRISTO

• Ciertamente de los ángeles dice: El que hace a sus ángeles espíritus, y a sus ministros llamas de fuego.
• Mas del Hijo dice: Tu trono, oh Dios, por el siglo del siglo; cetro de equidad es el cetro de tu reino. 
• Has amado la justicia, y aborreces la maldad, por lo cual te ungió Dios, el Dios tuyo, con óleo de alegría mas que a tus compañeros.
• Y: Tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra, y los cielos son obra de tus manos.
• Ellos perecerán, mas tú permaneces; y todos ellos se envejecerán como una vestidura.
• Y cómo un vestido los envolverás, y serán mudados; pero tú eres el mismo, y tus años no acabarán. 
• Pues, ¿a cual de los ángeles dijo Dios jamas: Siéntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos por estrado de mis pies?
• ¿No son todos espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de los que serán herederos de la salvación?
• Oh mi Cristo, Tú siendo Rey,  te hiciste siervo. 
• Sin embargo, fue ubicua su autoridad hasta en el ignoto universo.
• Y toda genuflexa rodilla, adoró tu glorioso nombre en los más insospechados senderos.
• Oh Sumo Redentor, tu muerte, y muerte de cruz en el Calvario, tornó la obscuridad en paraíso de gloria para los salvos. 
• Esta grandiosa salvación, no habría sido posible sin ser una nueva criatura.
• Y al perseverar en santidad, oh Señor, de tu eterna morada serán. 
• Porque nada será impedimento para tus discípulos irreprensibles. 
• Y esta excelsa gracia, oh Cristo Jesús, nos la concedió tu majestuoso e inmarcesible perdón.
•             Paz de Cristo