- La Biblia enseña: Y aconteció que al cabo de los siete días vino a mí palabra de Jehová, diciendo:
- Hijo de hombre, yo te he puesto por atalaya a la casa de Israel; oirás, pues, tú la palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte.
- Cuando yo dijere al impío: De cierto morirás; y tú no le amonestares ni le hablares, para que el impío sea apercibido de su mal camino a fin de que viva, el impío morirá por su maldad, pero su sangre demandará de tu mano.
- Pero si tú amonestares al impío, y el no se convirtiere de su impiedad y de su mal camino, él morirá por su maldad, pero tú habrás librado tu alma.
- Si el justo se apartare de su justicia e hiciere maldad, y pusiere yo tropiezo delante de él, él morirá, porque tú no le amonestaste; en su pecado morirá, y sus justicias que había hecho no vendrán en memoria; pero su sangre demandaré de tu mano.
- Pero si al justo amonestares para que no peque, y no pecare, de cierto vivirá, porque fue amonestado; y tú habrás librado tu alma.
- Oh mi Cristo, todo lo que obre fuera de tu sana doctrina, para su futuro acontecer será horrendo.
- Tú por ser mi atalaya, exhortarás al impío biblicamente.
- Porque si no le hicieres retractarse de sus andanzas con el maligno, serás copartícipe de su devenir errático.
- Si por el contrario, tú le hubieres hecho conocedor de su obscuro proceder, e hiciere caso omiso, tu culpabilidad será extinta.
- El justo llevado por la diabólica malignidad, al no recibir el precepto celestial, te hará ser en su pecado colaborador necesario.
- Sin embargo, si se hubiere arrepentido de su humano pecar, vivirá, y tú recibirás la corona de gloria.
- Paz de Cristo
lunes, 6 de enero de 2025
NINGUNA VICISITUD NOS ES AJENA EN EL GLORIOSO NOMBRE DEL TODOPODEROSO SEÑOR Y SALVADOR JESUCRISTO
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario