Jesús, dijo: Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas las cosas os serán añadidas.
Analizando con desvelo toda trampa del maligno,
nunca sufrirán desmayo las almas más bendecidas;
porque han puesto toda la fe en el Altísimo Señor Jesucristo.
La Biblia dice: Bienaventurado el varón que soporta la tentación; porque cuando haya resistido la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman.
Si hacemos todas las cosas en el nombre de Jesús,
nos gloriaremos siempre en cualquiera de las situaciones que en nuestra vida acontezcan;
porque con ellas interiorizaremos el gozo de la eterna plenitud.
Y también: Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo.
Ninguna incertidumbre embargará mi espíritu, alma y cuerpo al invocar el glorioso nombre del Señor Jesucristo.
Si permanezco asido, oh Señor, a tu excelsa diestra de invariable amparo,
de lo alto habré recibido la unción del Santo Espíritu.
Sí, a través de la fe en la Palabra,
llegarás a la sagrada revelación del pensamiento Cristocéntrico.
Y es que, oh Rey de reyes, tu amor es la medida de perfección del que ama,
para sentir en el corazón la sobrenatural gracia del cielo.
Has de desterrar la más mínima duda;
porque profana lo sagrado.
Oh Todopoderoso Salvador Jesucristo, mi alma ante tu omnisciencia está desnuda;
y anhelo la santa pureza del barro del Sumo Alfarero, que moldeará la esencia de mi ser, para que con su galardón traspase el dintel de la gloria del bienaventurado.
Paz de Cristo
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