NO HAGAS ACEPCIÓN DE PERSONAS, Y PREDICA LA PALABRA EN CRISTO

•  Alza la voz en el nombre de Jesús,
• para anunciar su Palabra a todos los perdidos. 
• Muchos partirán de las tinieblas, hasta su admirable luz; 
• y de los llamados, algunos tendrán el gran gozo de ser escogidos.
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• Predica sin hacer acepción de personas; 
• porque tú no conoces la voluntad del Señor.
• Y has de resistir hasta la sangre, cuando el gran Yo Soy te lleve a salvar almas inconversas;
• que por estar sometidas a su inicua sordidez, nunca han conocido, oh Alto y Sublime, tu incomparable amor.
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• Si tu visión es coincidente con los ojos de Cristo Jesús, 
• te sentirás profundamente conmovido.
• Y verás a través de su majestuosa luz,
• para dar paz al afligido. 
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• Jesús, dijo: Porque como el Padre tiene vida en sí mismo, así ha dado al Hijo el tener vida en sí mismo, y también le dio autoridad de hacer juicio, por cuanto es el Hijo del Hombre. 
• No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz; y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo,  a resurrección de condenación.
• Cuan importante es la predicación del Evangelio de la gracia, para que toda alma se salve.
• Pero el afirmar: heme aquí, yo iré, es la indispensable condición. 
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• Jesús, finalmente se apareció, a los once mismos, estando ellos sentados a la mesa, y les reprochó su increduludad y dureza de corazón, porque no habían creido a los que le habían visto resucitado.
• Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.
• El que creyere y fuere bautizado será salvo; mas el que no creyere sera condenado.
• El Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, fue voluntariamente en la cruz del Calvario por tus pecados crucificado.
• Haz con tu perfecta obediencia a la Sagrada Escritura, 
• ser por amor a su nombre que es sobre todo nombre, eternamente bienaventurado.
•                        Paz de Cristo