SANTIAGO 1:21,22 EN CRISTO

• Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas. 
• Pero sed hacedores de la palabra, y no solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos.
• Y no servirá como excusa el desconocimiento de las Escrituras Sagradas;
• porque nuestro máximo deber, oh Rey de reyes, es escudriñar tus bíblicos designios.
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• La Biblia dice: Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón. 
• Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.
• El ser humano es contrario al camino angosto por el que transita el Evangelio, mostrando su persistente desafección;
• pero esta actitud le abocará irremisiblemente a la final condenación eterna.
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• La tibieza que reprueba el Alfa y la Omega, 
• es la perfecta máscara del maligno, para usarnos como meras marionetas. 
• Damos por bueno, lo que para el Altísimo Señor Jesucristo se constituye en extrema afrenta,
• al discurrir por el obscurantismo de las antiguas sendas.
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• Arquetípica es la concupiscencia en el óxido del alma.
• Oh mi Cristo, nada hace más prodigios que lo que toca tu excelsa diestra, para revertir la maldad en grandiosa bondad. 
• ¿Será qué la visión, oh Alto y Sublime, que en tu nombre no ama, 
• ha distorsionado su candor espiritual, y se ha tornado en irreversible opacidad?
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• A todo ser humano, oh Fiel y Verdadero,
• Tú le has hecho santos llamados a su corazón.
• Y únicamente por tu poder, oh Señor, sabrán en el dia postrero; 
• si por gracia les alumbró la eterna salvación.
•                          Paz de Cristo