TU LADO INFÉRTIL, PRUEBA EN CRISTO

• ¿Por qué desestima la humanidad regocijarse en la gracia de Cristo?
• Sí, muy necesaria es la prueba, oh Señor, a la que Tú nos sometes en nuestra vida.
• El Rey de reyes, derramó su majestuosa sangre en la cruz del Calvario, para engendrarte por hijo;
• y tú con escarnio y laceración, hiciste más profunda su sagrada herida.
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• Lo infértil del ser humano,
• no ha lugar en el Fiel y Verdadero. 
• Nadie puede tachar de injusto al Santo,
• Él dio su vida por los más ignomoniosos pecadores crucificado en un madero.
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• Jesús, dijo: Asimismo el reino de los cielos es semejante a una red, que echada en el mar, recoge de toda clase de peces; y una vez llena, la sacan a la orilla; y sentados, recogen lo bueno en cestas, y lo malo echan fuera.
• Así será al fin del siglo: saldrán los angeles, y apartarán a los malos de entre los justos, y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crijir de dientes.
• Ante toda emboscada del maligno, habremos de hollar, oh Alto y Sublime, tu sagrada senda con delicada prudencia, 
• para evitar toda encrucijada de los inicuos e irreverentes.
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• Del incredulo es la actitud, 
• que le lleva a no aceptar la verdad del gran Yo Soy.
• Porque leyendo la Sagrada Escritura, no ve su fulgor hecho haz de  luz, 
• en el glorioso día que el Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, nos ha dado hoy.
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• Tu corazón ha de tener un encuentro sobrenatural con el autor y consumador de la fe.
• En la voluntad del Sumo Hacedor está el devenir de tu existencia. 
• Porque lo que el mundo no ve,
• lo derramará en tu alma el poder de su incomparable presencia.
•                        Paz de Cristo