Jesús, dijo: Porque ¿qué aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su alma? ¿O qué recompensa dará el hombre por su alma?
Oh Señor, de una sola gloria habla tu Evangelio.
El ser humano, fija en la falsa gloria su existencia efímera,
escarnizando la eterna morada del bendito cielo.
Oh Cristo, en la egolatría,
fundamenta el hombre sus mundanas aspiraciones.
Y ultraja la sabiduría;
anteponiendo, oh Señor, a tu bendición sus perversas maldiciones.
Oh Cristo Jesús, he llegado a ser el dueño de toda la tierra;
y estoy siendo preso de mi propia vanidad.
Ahora, he de escudriñar tu Palabra,
que es la sagrada senda de eternidad.
Oh Señor Omnipotente, edificar sobre la Roca,
se convertirá en la más sólida arquitectura.
Porque la única cosa gloriosa,
es ser en tu Nombre nueva criatura.
Oh Señor Jesucristo, meditaré con persistencia,
en tus eternos pensamientos.
Y tu excelsa diestra ha de ser mi sobrenatural delicia;
para elevarme a tu gloria, con el gozo de los santos.
Paz de Cristo
Amén amén
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