DISIPAD VUESTROS MIEDOS Y VUESTRAS DUDAS EN CRISTO

• Oh mi Cristo, 
• inexpugnables somos en tu sobrenatural presencia.
• Y es en tu Santo Espíritu, 
• donde vivimos con gozo la gloriosa manifestación de excelencia. 
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• Oh Cordero inmolado, 
• para el que cree en tu majestuoso nombre, no existe ningún resquicio de duda sobre tu ajusticiamiento en la cruz del Calvario. 
• Y por tu preciosa sangre derramada, oh Señor, fue redimido y justificado,
• para optar a la salvación, el ser que puso su mirada en el celestial santuario.
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• Oh Sumo Alfarero, 
• en tu rueda fuimos transformados;
• y por ser un vaso nuevo,
• se nos abrió la puerta del paraíso a los siervos santificados.
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• Oh Todopoderoso Salvador, 
• tu gracia nos perfeccionó. 
• Y refugiados en tu excelsa diestra no tenemos temor,
• porque de todo ataque del maligno nos preservó.
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• Oh Alfa y Omega, 
• Tú nos has dado gloria y honra en las circunstancias más adversas.
• Y es que, al que te tuvo obediencia, 
• nunca le arredraron las humanas ofensas.
•               Paz de Cristo