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domingo, 27 de febrero de 2022

NO PARTICIPES DE LAS TINIEBLAS DEL MALIGNO, SÉ SANTO EN CRISTO

  • Jesús, dijo, Sed santos, porque yo soy santo. 
  • Rae de tu vida,
  • todo inmisericorde pecado,
  • para que sea tu alma santa por el Señor recibida. 

  • La Biblia dice: Hijo mío, si recibieres mis palabras, y mis mandamientos guardares dentro de ti, haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; si inclinares tu corazón a la prudencia, si clamares a la inteligencia, y a la prudencia dieres tu voz; si como a la plata la buscares, y la escudriñares como a tesoros, entonces entenderás el temor de Jehová, y hallarás el conocimiento de Dios. 
  • Porque Jehová da la sabiduría, y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia. 
  • Oh mi Cristo, vivifícanos para que seamos siervos en tu nombre consagrados;
  • y podamos ser tus probos hijos de excelencia.

  • La Biblia enseña: Él provee de sana sabiduría a los rectos; es escudo a los que caminan rectamente. 
  • Es el que guarda las veredas del juicio, y preserva el camino de los santos.
  • Oh Altísimo Señor Jesucristo, sana nuestra infecta mente,
  • para que por tu luz inaccesible seamos probados.

  • La Biblia enfatiza: Entonces entenderás justicia, juicio y equidad, y todo buen camino.
  • Cuando la sabiduría entrare en tu corazón, y la ciencia fuere grata a tu alma, la discreción te guardará; te preservará la inteligencia, para librarte del mal camino, de los hombres que hablan perversidades, que dejan los caminos derechos, para andar por sendas tenebrosas; que se alegran haciendo el mal, que se huelgan en las perversidades del vicio; cuyas veredas son torcidas, y torcidos sus caminos.
  • Oh Señor Altísimo, 
  • a ti no te agrada el siervo ocioso, que se enseñorea de su vanidad ante los ojos de los que te son invariablemente dignos.

  • La Biblia asevera: Bienaventurado el hombre que halla la sabiduría, y que obtiene la inteligencia; porque su ganancia es mejor que la ganancia de la plata, y sus frutos más que el oro fino. 
  • Más preciosa es que las piedras preciosas: y todo lo que puedes desear, no se puede comparar a ella. 
  • Oh Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, 
  • refugio de gloria es tu excelsa diestra. 
  •                Paz de Cristo 

 

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