que superó los tenebrosos abismos.
Y edificó sobre la Roca,
la absoluta obediencia a los versículos bíblicos.
Oh Cristo Jesús, el camino con noche cernida,
lo hace visible tu radiante nitidez.
Senda de consagrada vida,
que en el vientre materno, oh Señor, saciaste con tu agua bendita mi primera sed.
Oh Señor Jesucristo, nuestro palpitante corazón,
es el fiel testigo del acelerado o parsimonioso paso del tiempo.
Oh Omnipotente Creador, no le consientes pausas en su firme provisión,
y es el que mide nuestra existencia sin dar pábulo al desaliento.
Oh Señor de señores, has dispuesto las rutilantes estrellas,
en un espacio de límites insospechados.
Y la era de la gracia, en la Critocéntrica tierra nos dispensas,
para hacernos bienaventurados.
Oh Rey de la gloria, habrá mayor privilegio,
que hayas descendido del cielo, para darnos tu sagrado amor.
Y ofrecernos el poder de salvación en tu Evangelio;
al abrir el lugar santísimo, con tu muerte y resurrección, oh Todopoderoso Señor.
Paz de Cristo
Oh Cristo Jesús, el camino con noche cernida,
lo hace visible tu radiante nitidez.
Senda de consagrada vida,
que en el vientre materno, oh Señor, saciaste con tu agua bendita mi primera sed.
Oh Señor Jesucristo, nuestro palpitante corazón,
es el fiel testigo del acelerado o parsimonioso paso del tiempo.
Oh Omnipotente Creador, no le consientes pausas en su firme provisión,
y es el que mide nuestra existencia sin dar pábulo al desaliento.
Oh Señor de señores, has dispuesto las rutilantes estrellas,
en un espacio de límites insospechados.
Y la era de la gracia, en la Critocéntrica tierra nos dispensas,
para hacernos bienaventurados.
Oh Rey de la gloria, habrá mayor privilegio,
que hayas descendido del cielo, para darnos tu sagrado amor.
Y ofrecernos el poder de salvación en tu Evangelio;
al abrir el lugar santísimo, con tu muerte y resurrección, oh Todopoderoso Señor.
Paz de Cristo
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