Oh Cristo, tu amor santo
es la Gloriosa Palabra Omnipotente,
que a través del Universo,
en su Omnipresencia permanece.
Si en el alma hay amor,
en silencio se edifica;
y proclama la Gloria del Señor,
con el sonido de la alabanza, que en su presencia santifica.
Guardanos en tu Gracia,
para ser bendecidos por el perdón,
que del amor es fortaleza
en el resplandor del corazón.
No hay libertad sin amor:
poder que concedió el cielo
en la crucifixión de Cristo Jesús nuestro Señor,
y su preciosa sangre derramada, fue Majestuosa Redención Universal del Santísimo Cordero.
La verdad se reviste de pureza,
si adoras al Señor;
y en la visión de su grandeza
prevalece el amor.
Paz de Cristo.
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