No negarás, la Verdad;
si Cristo es tu sublime altar,
y puerta de Eternidad,
para sólo a Él adorar.
si Cristo es tu sublime altar,
y puerta de Eternidad,
para sólo a Él adorar.
No hay mayor honor
en el corazón,
que gloriarse en Jesucristo, alabándole con el gran amor
de su Eterna Bendición.
El Cristocentrico Universo,
dobla toda rodilla en señal de adoración,
ante el Señor de señores y Rey de reyes Eterno,
que a la muerte dio Vida en su Resurrección.
El camino de Gloria,
se hace muy angosto en los últimos metros; utiliza la espada de dos filos
en tu victoria,
que es la Santa Palabra revelada por los Cielos.
Ser Santo
es honrar al Señor.
Ora en el Templo más alto,
para que tu alma sea del Salvador.
No hay comentarios:
Publicar un comentario