EL LETAL OBSCURANTISMO, DESHAZLO EN CRISTO

• Oh Cristo, de la ignorancia de nuestros ancestros, 
• hemos heredado una inicua rebeldía.
• Oh Rey de reyes, en tu nombre somos siervos;
• pero inopinadamente, nos asaltan perniciosos pensamientos de ignominia.
• 
  
• Oh Cristo Jesús, 
• fortaleza inexpugnable es nuestro espíritu, ante un persistente y demoníaco revanchismo.
• Y es que, en el bíblico conocimiento de la eterna plenitud; 
• nuestra alma por la Palabra ha sido adoctrinada, para anular toda asechanza del maligno.
• 
  
• Oh Cristo Redentor, 
• Tú has sido levantado, 
• para el que posa los ojos en tu incomparable piedad, con amor, 
• sea de tu gloria bienaventurado. 
• 
  
• Oh Santo de Israel, 
• derramaste, en la cruz del Calvario, hasta la última gota de tu preciosa sangre, para dar cumplimiento al nuevo pacto de la gracia. 
• Y, oh Señor, la redención de toda la humanidad la consumaste por fe,
• para librar de la gran tribulación, a los que Tú habrías de añadir a tu amada Iglesia. 
• 
  
•  Oh Cordero inmolado, 
• los clavos que traspasaron tus manos y tus pies, 
• nos recuerdan que el que no haya crecido en tu santo nombre, ya ha sido condenado.
• ¿Has entendido el eterno significado, que es creer en el Señor de la mies?
•                     Paz de Cristo 

¿POR QUÉ HACES DE LA EXCELENCIA, VULGARIDAD EN CRISTO?

•  Tornar lo vulgar en excelente ha de ser tu propósito en Cristo. 
• Y para no rendirte ante la prueba,
• no has de tener ningún prejuicio;
• porque, oh Señor, en tu Sagrada Palabra está la excelencia. 
•  
• Oh Soberano Señor, 
• tus misericordias son nuevas cada mañana.
• Y todo lo puede el amor, 
• que es en las vigilias de la noche, luz majestuosa. 
• 
  
• La bendición ya te la ha dado Dios.
• ¡Adminístrala con sabiduría!
• Has de suplir los pensamientos obscenos,
• por la santidad que del cielo se derrama cada día. 
• 
  
• La dificultad de sentir al Rey de reyes, 
• ha de ser resuelto por tu veleidoso corazón. 
• No te dejes embaucar por sus fluctuaciones, 
• que son propias de su precaria fe, llevándole a la abismal perdición. 
• 
  
• Oh Alfa y Omega, 
• los aberrantes impulsos a los que se ve sometido el ser humano, son propios de su irracionalidad. 
• Oh Altísimo Señor y Salvador Jesucristo, son tus bíblicas promesas, el sustento de la gloriosa e infalible excelencia;
• que no es otra cosa, oh Rey de la gloria, que tu perfecta verdad. 
•                   Paz de Cristo 

LO ESENCIAL ES AGRADARTE, OH CRISTO

• Oh mi Cristo,
• a ti te agrada que busquemos tu rostro a tiempo y fuera de tiempo.
• Y sabiduría de lo alto nos da el Santo Espíritu; 
• cundo invocamos tu sobrenatural presencia, con inefable celo. 
• 
  
• Oh Sumo Alfarero, 
• nada te fue impedimento,
• en la creación del perfecto universo; 
• porque con la sublime huella indeleble; lo que no se veía, lo hizo visible el Eterno.
• 
  
• Lo que os digo en tinieblas, decidlo en la luz; y lo que oís al oído, proclamadlo desde las azoteas. 
• Jesús, dijo: Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno. 
• Oh Santo de Israel, en tu nombre no ha lugar las almas condenadas;
• porque lo que se había perdido, Tú viniste a salvarlo.
•  
• Oh Sumo Redentor, 
• al que vive en la carne, le ha sido indiferente tu execrable sacrificio en la cruz del Calvario. 
• Y no podrá nunca regocijarse, oh Señor, 
• en el glorioso olor fragante de tu excelso santuario.
•  
• Oh Sumo Salvador, 
• tu muerte, sepultura y resurrección, a tus genuinos siervos nos dieron vida eterna.
• Y con tu sagrado amor,
• oh Rey de reyes, fueron revestidas las almas salvas de sagrada belleza.
•                    Paz de Cristo 

HAZ QUE LA PALABRA PREDICADA, SEA DE UNCIÓN EN CRISTO

• Qué la Palabra penetre en el corazón del oyente,
• para confirmar su solemne propósito. 
• Oh Cristo, tu nombre es futuro, pasado y presente;
• y en la siembra de tu semilla sagrada, se ha de transformar el inconverso en tu hijo bendito.
•  
• Oh Alfa y Omega, 
• que el fin de tu Sagrada Escritura, sea la espada de dos filos que penetre hasta diseccionar el alma y el espíritu. 
• En el poder de Dios, está su justicia plena,
• para el que en Él ha creído.
• 
  
• Oh Soberano Redentor, no permitas que desvirtuemos el Evangelio de la gracia, 
• con nuestra insolente necedad.
• Toda la Escritura en tu Santo Espíritu está inspirada,
• para el perfecto conocimiento de la santísima verdad. 
• 
  
• Oh Rey de reyes, 
• nuestros exhortos, a la exaltación de tu santo nombre han de someterse. 
• Porque en el cumplimiento, oh Rey de la gloria, de tus magnificentes leyes,
• los discípulos consagrados, nos hemos guardado indefectiblemente. 
• 
  
• Y es que, no solo hay que ser oidor de la Palabra, 
• sino también hacedor.
• Porque el siervo, oh Soberano Salvador, que te adora con el alma,
• es porque depende absolutamente de tu glorioso amor.
•                     Paz de Cristo 

VENCED AL DIABLO, RESISTID EN CRISTO

• Tú venciste al imperio de la muerte con tu muerte,
• oh Cordero inmolado. 
• Y por resistir la tentación el que es valiente, 
• morará en la gloria del bienaventurado.
•  
• La Biblia dice: No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia. 
• He aquí que todos los que se enojan contra ti serán avergonzados y confundidos; serán como nada y perecerán los que contienden contigo. 
• Oh Sumo Hacedor, en tu nombre voy de gloria en gloria,
• hasta que la pureza del alma traspase el Lugar Santísimo. 
• 
  
• Jesús, dijo: Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas. 
• Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios. 
• Oh Alto y Sublime, estuvimos en el lodo hediondo, pero somos almas arrepentidas;
• y nuestro mayor anhelo es ser por tu excelsa diestra glorificados. 
• 
  
• La Biblia enseña: Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros. 
• Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones. 
• Oh Fiel y Verdadero, con el espíritu quebrantado, nos postraremos a tus pies los irreprensibles siervos.
• Y en nuestro altar del día postrero, incensadas de loor serán nuestras oraciones. 
• 
  
• Pensad en la incomparable paz de Cristo Jesús, 
• en su abominable martirio del Calvario.
• Nunca ha habido ni habrá tan majestuosa luz, 
• que emane con tanta gloria de su sagrado santuario.
•                     Paz de Cristo 

MATEO 24:30,31 EN CRISTO

• Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo entre las nubes del cielo, con poder y gran gloria. 
• Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro.
• Y arrebatarás, oh Señor, a tus hijos en victoria; 
• que en tu nombre, dieron del Evangelio de la gracia santo testimonio.
• 
  
• Oh Cordero inmolado, 
• tu ajusticiamiento en la cruz del Calvario, no conmovió a la mayoría de las almas. 
• Es más; no han dado ningún pábulo,
• oh Rey de la gloria, al santísimo sufrimiento de tus lacerantes llagas. 
• 
  
• Oh Soberano Redentor, 
• ¿por qué sobrevino de tu gloriosa resurrección, tamaña incredulidad, incluso a tus probos discípulos?
• ¿No eran del Señor, 
• seguidores tan dignos?
•  
• Oh Santo de Israel. del misterio de tu piedad, 
• nos concediste el sagrado perdón. 
• Porque únicamente, oh Alfa y Omega, en tu santísima verdad,
• está la sobrenatural unción. 
• 
  
• Oh Sumo Salvador, 
• por la inescrutable justicia de la fe, nos ha sido revelada tu gloriosa resurrección. 
• Nunca nadie nos ofrendará tan grandioso amor;
• cuando, desde el cruel martirio de la cruz, le pediste al Eterno, que no nos tuviera en cuenta tu crucifixión. 
•                      Paz de Cristo             

NO HAY OTRO ESPACIO SOBRENATURAL, SINO EN CRISTO

• Oh mi Cristo, habitas la eternidad, porque tu omnipresencia es per se;
• y llenas lo pequeño en la inmensidad, y la inmensidad de lo pequeño. 
• Eres, oh Señor, la fuente eterna que sacia la sed,
• del que holló la ardiente arena del desierto. 
• 
  
• Oh Sumo Redentor, 
• en tu amada Iglesia, viven los siervos perfectos.
• Y revestidos de excelso amor,
• moraran en los gloriosos cielos. 
•  
• Oh Altísimo Señor Jesucristo, 
• del universo Tú eres el templo.
• Y es que, 
• el Santo Espíritu, 
• todo lo sustenta con su sobrenatural cimiento. 
• 
  
• Oh Rey de reyes,
• tu obra maestra, se obstina en lo más necio; 
• cuando, oh Señor, si procede al arrepentimiento; Tú le provees,
• de la gloria eterna en el día postrero. 
• 
  
• Oh Santo de Israel, 
• Tú te manifestaste en carne, para darnos salvación. 
• Pero la codiciosa humanidad, sumida en su nimio y entenebrecido poder;
• no permite, oh Alfa y Omega, que tu majestuosa luz, traspase su endurecido corazón. 
•                   Paz de Cristo 

HABACUC 3:18,19 EN CRISTO

• Con todo, yo me alegraré en Jehová, y me gozaré en el Dios de mi salvación. 
• Jehová el Señor es mi fortaleza, el cual hace mis pies como de ciervas, y en mis alturas me hace andar.
• Oh Rey de la gloria, todas las cosas tienen cumplimiento en tu tiempo a la sazón;
• porque al invocar el nombre de Jesús, tenemos provisión de su multiforme gracia, que nos puede el alma sanar.
•  
• Oh Soberano Señor, 
• ante la impasible cerrazón de la humanidad;
• tus verdaderos siervos, testificamos en tu nombre, oh Sumo Salvador, 
• la gloriosa doctrina de Unicidad. 
• 
  
• Jesús les dijo: ¿Nunca leísteis en las Escrituras: La piedra que desecharon los edificadores, ha venido a ser cabeza del ángulo. El Señor ha hecho esto, y es cosa maravillosa a nuestros ojos?
• Por tanto os digo, que el reino de Dios será quitado a vosotros, y será dado al que produzca los frutos de él. 
• Oh generación de hipócritas, nunca seréis por el Rey de reyes bendecidos;
• porque todos los obscenos corazones que rehúsen el arrepentimiento, no serán justificados por el don de la fe.
• 
  
• No hagas intrascendente tu prodigiosa vida, 
• que por el Hijo del Hombre, crucificado en el Calvario, 
• te fue concedida; 
• para ser un alma bienaventurada del eterno santuario. 
•  
• La Biblia dice: Palabra fiel es ésta: Si somos muertos con él, también viviremos con él; si sufrimos, también reinaremos con él; si le negáremos, él también nos negará.
• Si fuésemos infieles, él permanece fiel; él no puede negarse a sí mismo. 
• Con perfecta justicia, al ser humano por sus obras pagará;
• porque de tu excelsa diestra emana el majestuoso poder, oh mi Señor Altísimo. 
•                      Paz de Cristo 

NUESTRO CONOCIMIENTO ES EXIGUO EN CRISTO

• Oh Cristo Jesús, 
• tu pensamiento eterno está en la Sagrada Escritura. 
• Y al corazón de piedra lo transformaste en un corazón de carne; cuando, oh Señor, tu bautismal luz,
• convirtió al ser humano en una nueva criatura. 
• 
  
• Oh Soberano Señor, no se hará mayor solemnidad, 
• sino en la lectura de tu Sagrada Palabra.
• Porque en ella está la eterna verdad, 
• para el que al Rey de reyes ama.
• 
  
• Oh Sumo Alfarero, nada nos será revelado, a través de nuestra racionalidad,
• si no llamamos a Jesús, Señor por el Espíritu. 
• Y es que, sin santidad, 
• nadie verá el rostro del Altísimo Señor Jesucristo. 
• 
  
• Oh Rey de la gloria, como siervos genuinos hemos conocido tus bíblicos milagros;
• pero no hemos podido tener conocimiento de su intrínseca sabiduría. 
• Y sabemos que tendremos ilimitada gracia de lo alto, en el arrebatamiento con  cuerpos glorificados, 
• por el Señor Omnipotente, en el que nuestra alma se gloría.
•  
• Jesús, dijo: Sí, Padre, porque así te agradó. 
• Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni al Padre conoce alguno, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar. 
• Desde antes de la fundación del mundo, el Eterno nos escogió.
• para que con santísimo celo nos pudiéramos en Él gloriar.
•                          Paz de Cristo 

A LA INMUNDA HUMANIDAD, REDIMIÓ TU NOMBRE, OH CRISTO

• Oh Cristo Redentor, 
• de olor fragante fue tu voluntario sacrificio en la cruz del Calvario. 
• Y a tus consagrados siervos, revestidos de tu glorioso amor,
• nos abriste la puerta del eterno santuario. 
• 
  
• Oh Santo de Israel, 
• la vileza de la humanidad, dio su aprobación a tu cruel y abominable deicidio.
• Pero el diablo no entendió, que el ajusticiado en la cruz del Calvario, era el autor y consumador de la fe.
• Y que al tercer día resucitó; porque su templo destruyeron, pero Él es el templo universal reconstruido. 
• 
  
• La Biblia dice: Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen y tiemblan.
• ¿Mas quieres saber, hombre vano, que la fe sin obras es muerta?
• Oh Cristo Jesús, todas tus perfectas obras, las estrellas de tu creación contemplan;
• y en su inherente luz nos es manifiesta. 
• 
  
• Oh Rey de la gloria, 
• cada segundo del día sentimos tu presencia. 
• Y vamos de victoria en victoria; 
• porque somos heraldos, oh Señor, de tu magnificencia. 
• 
  
• Oh Sumo Hacedor, 
• damos testimonio de tu santo nombre hasta lo último de la tierra.
• Y te profesamos tan inconmensurable amor,
• por ser Tú, oh Sumo Salvador, el Alfa y la Omega.
•                    Paz de Cristo 

¡PURIFICA TU ALMA EN CRISTO!

• Oh mi Cristo, 
• ha de ser drástico el desapego a lo carnal,
• para que la convicción de pecado, la interiorice el endurecido corazón, vivificado por el Santo Espíritu;
• y supliendo toda necesidad en el espíritu, por la gracia celestial.
• 
  
• Oh Alto y Sublime, 
• en un balance de deuda espiritual, la contumaz humanidad está sumida.
• Sé, oh Señor, que tu llamado a revertir el mal en tus postulados persiste, 
• para que en tu nombre que es sobre todo nombre, sea el alma concernida.
• 
  
• Jesús, asevera: Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio.
• Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado. 
• Oh Rey de reyes, de tu majestuosa gloria está el ser humano absolutamente preciso;
• pero su disoluta vida, no percibe la luz del bienaventurado. 
• 
  
• Por lo cual salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, y no toquéis lo inmundo; y yo os recibiré, y seré para vosotros por Padre, y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso. 
• Así que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios. 
• Oh Alfa y Omega, tu misterio de gloria es grandioso.
• Y cuando veamos tu rostro, tus santos siervos seremos de la sabiduría de lo alto saciados.
• 
  
• La Biblia enseña: Porque para Dios somos grato olor de Cristo en los que se salvan, y en los que se pierden; a estos ciertamente olor de muerte para muerte, y a aquellos olor de vida para vida. Y para estas cosas, ¿quién es suficiente?
• Pues no somos como muchos, que medran falsificando la palabra de Dios, sino que con sinceridad, como de parte de Dios, y delante de Dios, hablamos en Cristo. 
• Oh Sumo Redentor, nadie conoce tu poder intrínsicamente;
• pero sabemos que a la eternidad somos guiados; no por nuestra vista, sino por la sobrenatural fe del Santo Espíritu. 
•                   Paz de Cristo 

¿QUÉ PARTE, NO HAS ENTENDIDO EN CRISTO?

• Sí, sigues minimizando tu ignominiosa vida,
• al desoír la Sagrada Palabra. 
• Oh mi Cristo, ¿será que nuestra percepción, es antibíblica en gran medida?
• ¿O qué por su sobrenatural espiritualidad, se ve superada la bisoñez de nuestra alma?
• 
  
• Oh Cristo Jesús, la magnificencia de tu listón, 
• tiene una eterna medida. 
• Y por desconocer, la gracia que le has dado al inconmensurable latir de nuestro corazón; 
• asumimos el plan de salvación, sin una santificación asumida. 
•  
• Jesús, dijo: ¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca. 
• El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro del corazón saca malas cosas. 
• Oh Santo de Israel, Tú eres nuestro escudo; y la Palabra, nuestra espiritual espada ante toda asechanza demoníaca.
• 
  
• Oh Sumo Alfarero, 
• creados del barro fuimos, a tu imagen y conforme a tu semejanza. 
• Oh Rey de la gloria, Tú te despojaste de la universal corona y cetro, 
• para que tuviéramos conocimiento de que eras Dios manifestado en carne; y que no viniste a condenarnos, sino a salvar nuestra alma.
• 
  
• Oh Altísimo Señor y Salvador Jesucristo, 
• conságranos como perfectos siervos de tu exaltación. 
• Y asidos a la verdad del Santo Espíritu, 
• estaremos postrados a los pies del Eterno, en piadosa adoración. 
•                       Paz de Cristo 

SIN SIEMBRA, NO HAY FRUTO EN CRISTO

• Oh Cristo, 
• en pos de la mentira, 
• no ve tu grandioso fruto el inicuo;
• y por su falta de sabiduría, estará asido a su tétrica vanidad de por vida.
• 
  
• Oh Altísimo Señor Jesucristo,
• la excelencia de tu gloria, se torna en obsolescencia para el necio.
• ¿Será tal la imposibilidad, de que el Santo Espíritu,
• sea permeable para el mundo incrédulo?
• 
  
• Oh Rey de reyes, 
• de manera ancestral, es heredado por generaciones el obscurantismo. 
• Y no obtienen de sus ídolos, sino vanos bienes,
• que dan fatuas alas, al que no renuncia a lo séptico y altivo.
•  
• Oh Santo de Israel, 
• Tú viniste a sacar del pozo hediondo, al que iba por el camino de muerte.
•  Sin embargo, gran parte de la chusma te fue infiel;
• no entendiendo, que la vida eterna nos es dada por la revelación de tu santo nombre.
•  
• Oh Cristo Redentor, 
• no penetró en el corazón obsceno, la lanza que en la cruz del Calvario traspasó tu costado.
• Y brotó tu preciosa sangre, dándonos gracia; y brotó también el agua, que nos lavó con la Sagrada Palabra, oh Señor, 
• para poder traspasar el glorioso umbral del bienaventurado. 
•                  Paz de Cristo 

CAMINO, VERDAD Y VIDA EN CRISTO

• Jesús, dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. 
• Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto. 
• Oh Altísimo Señor Jesucristo, en ti seremos salvos al fin;
• porque moraremos en la gloriosa eternidad del Lugar Santísimo. 
• 
  
• Jesús, constata: No os dejaré huérfanos, vendré a vosotros. 
• Todavía un poco, y el mundo no me verá más; pero vosotros me veréis; porque yo vivo, vosotros también viviréis. 
• En el nombre del Soberano Redentor, seréis hijos probos,
• que de gracia recibiréis. 
• 
  
• Jesús, enseña: Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor. 
• Si guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor. 
• Oh Rey de reyes, inclina tu oído, a las plegarias de sobrenatural fulgor; 
• que acrisoladas, elevamos a tu glorioso santuario con el máximo candor. 
• 
  
• Jesús, asevera: Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste. 
• La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno. 
• Oh Santo de Israel, hechura bendita somos de tu linaje;
• porque Tú nos escogiste antes de la fundación del mundo. 
• 
  
• Oh gran Yo Soy, para tus genuinos siervos,  
• el haberles revelado tu nombre, es un grandioso honor.
• Y es que, han sido, oh Señor, por tu Santo Espíritu engendrados;
• y les has revestido con tu eterno amor.
•                        Paz de Cristo 

NO TE PONGAS LÍMITES EN CRISTO

• Jesús, dijo: Por eso os he dicho que ninguno puede venir a mí, si no le fuera dado del Padre. 
• ¿Queréis acaso iros también vosotros?
• Oh Cristo, en el eterno santuario, a todos y cada uno de tus siervos escogiste, 
• para que, de las oraciones de los santos, fueran los cielos incensados.
• 
  
• Oh Omnipotente Señor Jesucristo, 
• en tu ministerio público descubrimos la gloria eterna.
• Porque, oh Santo de Israel, lo que es consubstancial a tu Espíritu; 
• fue como el viento de Sion, que sana, por fe, la obscuridad del alma perversa.
• 
  
• Oh Rey de reyes, 
• tus milagros dan a conocer lo eterno.
• Y es que, los determinan las gloriosas leyes,
• que derrama el resplandor del cielo.
•  
• Oh Sumo Alfarero, 
• únicamente serán tus vasos de honra,
• los que reflejen en el día postrero, 
• la majestuosa luz de tu gloria. 
• 
  
• Oh Sumo Hacedor, 
• Tú me diste alas santas, para no caer en el infernal abismo.
• Y permaneceré en los mimbres del sagrado amor,
• que sustentan mi alma en el Señor Altísimo. 
•                    Paz de Cristo 

PROVERBIOS 10:18,19 EN CRISTO

• El que encubre el odio es de labios mentirosos; y el que propaga calumnia es necio. 
• En las muchas palabras no falta pecado; mas el que refrena sus labios es prudente.
• Oh Cristo, tu vida pagaste por precio;
• y ante tu grandioso sacrificio, muy pocos se consagraron en tu nombre, de los que vivían inmundamente.
• 
  
• La Biblia dice: La boca del justo producirá sabiduría; mas la lengua perversa será cortada.
• Los labios del justo saben hablar lo que agrada; mas la boca de los impíos habla perversidades.
• Oh mi Cristo, el engañoso corazón, en su penumbra vio tu luz admirable y bienaventurada;
• pero los más, se conformaron con sus perniciosas vanidades.
•  
• La Biblia enseña: Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. 
• Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas. 
• Oh Rey de reyes, sacia mi sed en tu fuente de eterna excelencia;
• y seré el siervo perfecto, que para tu gloria apruebas.
• 
  
• La Biblia constata: Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos de vosotros, sabiendo que recibiréis mayor condenación.
• Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, éste es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo. 
• Oh Santo de Israel, 
• Tamaña dificultad entraña la gloriosa salvación.
• Y es en la justicia de la fe,
• para conseguirla, donde ha de estar el sobrenatural tesoro de nuestro corazón.
• 
  
• La Biblia asevera: Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden; y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios.
• Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Dios, no es de él. 
• En nuestra salvación, como hijos del Omnipotente, hemos de estar celosamente en el Amén concernidos, 
• que es el autor y consumador de la fe.
•                      Paz de Cristo 

GÁLATAS 1:9,10 EN CRISTO

• Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema. 
• Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo. 
• Oh Rey de la gloria, nada quedará encubierto, que no descubra tu excelsa diestra;
• porque se hará manifiesto, por la verdad del Santo Espíritu. 
• 
  
• Oh Santo de Israel, 
• el ser humano está envanecido en su obscena idolatría.
• Y no puede, desde su precaria fe,
• ir en pos de la celestial sabiduría. 
• 
  
• Oh Alto y Sublime, 
• la humanidad vive inmersa en la mentira. 
• Y aún en su perversión abominable,
• con innumerables máscaras se empecina en hacer verdadera justicia. 
• 
  
• El único, que con su obra redentora en la cruz del Calvario nos justificó, fue nuestro Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo. 
• Él dio su vida, para darnos vida, y vida en abundancia. 
• Y cuenta da el Sagrado Escrito, 
• de su muerte, sepultura y resurrección, para con su preciosa sangre derramada sellar el nuevo pacto de la gracia. 
• 
  
• Jesús, constata: De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna: y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.
• De cierto, de cierto os digo: Viene la hora, y ahora es, cuando los muertos oirán la voz del Hijo de Dios; y los que lo oyeren vivirán. 
• Oh Omnipotente Redentor, exaltamos tu magnificencia; 
• y ante tus sagrados pies, nuestras postradas almas a tu majestuosa gloria clamarán.
•                    Paz de Cristo 

VIVIFÍCAME EN TU PALABRA, OH CRISTO

• He de ofrendarte adoración, 
• para servirte con ferviente celo, oh Cristo Jesús. 
• Sana mi altivo corazón, 
• y no pondrá impedimento a tu inaccesible luz.
• 
  
• Suple, oh Señor, los rudimentos de mi ignorancia, 
• por la sabiduría de lo alto.
• Y me habré desprendido de mi fatua arrogancia,
• para recibir la unción del que de Israel es Santo. 
• 
  
• No hagas desdén de la sobrenatural predicación poética, 
• y secunda su sagrada belleza. 
• Oh Cristo, ciñe a mi alma con la fe épica, 
• y vencerá en toda prueba con espiritual pureza.
• 
  
• Infinitas gracias, oh Rey de reyes, 
• por tu inconmensurable perdón.
• Y porque he confiado en tus majestuosos poderes, 
• perseveraré hasta consumar la gloriosa misión.
• 
  
• Oh Altísimo Señor y Salvador Jesucristo; 
• con la espada,
• que de la Palabra es tu Santo Espíritu;
• a mi alma, harás al fin bienaventurada.
•                 Paz de Cristo 

ETERNO ES EL ESPACIO EN TU SOLEMNE ADORACIÓN, OH CRISTO

• He aquí vienen días, dice Jehová, en que el que ara alcanzará al segador, y el pisador de las uvas al que lleva la simiente; y los montes destilarán mosto, y todos los collados se derretirán. 
• Asidos a tu excelsa diestra, oh Señor, permaneceremos en adoración.
• Oh Todopoderoso Rey de la gloria, únicamente tus verdaderos siervos en ti se gloriarán;
• porque con gozo superó las pruebas, su quebrantado corazón.
•  
• La Biblia dice: La bendición de Jehová es la que enriquece, y no añade tristeza con ella. 
• Tu preciosa sangre derramada en la cruz del Calvario, oh Cristo Redentor, dio pureza a nuestro ser.
• Nadie sabe, sino Tú, oh Sumo Salvador, quienes serán la almas arrebatadas de tu amada Iglesia;
• pero en las bodas del Cordero, sus vestiduras blancas darán fe.
• 
  
• Jesús, dijo: El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu. 
• Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es. 
• Oh Soberano Señor Jesucristo, 
• los que hemos creído en tu santo nombre, sabemos que eres per se.
• 
  
• Jesús, enseña: Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren. 
• Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren. 
• Oh Cristo Jesús, en inmarcesible vigilia las almas que te adoran persisten.
• Porque no hay otro Dios digno de adoración, sino el que es, el que era, y el que ha de venir: el Santo de Israel. 
• 
  
• Jesús, constata: He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona. 
• Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí; y escribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén la cual desciende del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo. 
• Oh Sumo Alfarero, en la visión de tu rostro, no habrá adoración más plena.
• Porque el regocijo glorioso de las almas eternas, será haber traspasado el umbral del cielo. 
•                        Paz de Cristo 

EFESIOS 6:14-16 EN CRISTO

• Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad, y vestidos con la coraza de justicia, y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.
• Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno.
• Oh Cristo, con tu admirable luz hemos de revertir toda maldad;
• para que cualquier vereda inmunda, se torne en nuestro recto camino.
• 
  
• Oh Alto y Sublime, 
• el paganismo ha disfrazado lo sagrado en un pensamiento vulgar.
• Y Tú, oh Señor, has condenado a los que hacen del santo Evangelio algo infame;
• explicitando en la Sagrada Escritura, que al gran Yo Soy por encima de todo hemos de amar.
• 
  
• Oh Alfa y Omega, 
• con la audible excelencia de nuestro corazón te habremos de escuchar.
• Para que nunca muestre su duda escéptica,
• en lo que debería ser su glorioso palpitar.
•  
• Oh Cordero inmolado, 
• no es, sino por fe que podamos entender tu ajusticiamiento en la cruz del Calvario. 
• Y de ahí, parte la extrema dificultad de que el ser humano sea glorificado;
• porque su abyecta insolemnidad, no ha lugar en el eterno santuario. 
• 
  
• Oh Rey de la gloria, 
• ninguna ignominiosa prebenda tuvo cabida en tu abominable martirio por la perversa humanidad. 
• Y todo siervo aprobado en tu nombre, para que sea galardonado con la sobrenatural victoria, 
• ha de pasar indefectiblemente, por su irreprensible sometimiento a la santísima verdad. 
•                   Paz de Cristo 

SALMO 4:2,3 EN CRISTO

• Hijos de los hombres, ¿hasta cuándo volveréis mi honra en infamia, amaréis la vanidad, y buscaréis la mentira?
• Sabed, pues, que Jehová ha escogido al piadoso para sí; Jehová oirá cuando yo a él clamare.
• Oh Cristo, Tú reviertes toda maldición en gloria bendita; 
• si revelando tu nombre al inicuo, de todo su corazón te amare.
• 
  
• Oh Soberano Redentor, 
• la ambigüedad del ser humano, resta su fe hasta la mínima expresión. 
• Y es que, es inaudible al cielo su clamor, 
• y no hace del gran Yo Soy exaltación. 
•  
• Oye siempre la voz del Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo;
• su Palabra está encriptada en un designio de eternidad. 
• Únicamente en la solemne adoración del Santo Espíritu, 
• encontrarás la sagrada verdad.
• 
  
• Los 66 libros de la Sagrada Biblia, 
• están indisolublemente unidos por el eterno pensamiento del Santo de Israel.
• Y de sus mandamientos emana la vida,
• por fe y para fe.
•  
• Manifiesta es la incredulidad de los que no se postran a tus pies,
• oh Soberano Salvador. 
• Bienaventurado eres pobre de espíritu; porque con toda tu alma crees,
• en el que del universo es el Sumo Creador. 
•                    Paz de Cristo 

LA ERRÁTICA VISIÓN, ÚNICAMENTE SE SANA CON TU LUZ, OH CRISTO

• La Biblia dice: Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable; vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia. 
• Amados, yo os ruego como extranjeros y peregrinos, que os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma, manteniendo buena vuestra manera de vivir entre los gentiles; para que en lo que murmuran de vosotros como malhechores, glorifiquen a Dios en el día de la visitación, al considerar vuestras buenas obras.
• Oh Cristo, guárdanos de toda asechanza del diablo, él es padre de mentira;
• y presérvanos de toda contaminación, en sus encrucijadas tenebrosas.
• 
  
• Otra vez Jesús les habló diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida. 
• Y también: La lámpara del cuerpo es el ojo, si tu ojo es bueno, todo tu cuerpo estará lleno de luz; pero si tu ojo es maligno, todo tu cuerpo estará en tinieblas. Así que, si la luz que en ti hay es tinieblas, ¿cuántas no serán las mismas tinieblas? 
• Oh Cristo Jesús, auméntanos la fe, que de gracia en nuestro ser ha sido recibida,
• siendo tu fortaleza, oh Señor, el santo gozo con el que nos apruebas. 
• 
  
• La Biblia enseña: Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.
• Juré y ratifiqué que guardaré tus justos juicios.
• Oh Señor de señores, en tu santo nombre está escrito nuestro bienaventurado destino;
• porque solo de tu amada Iglesia, son los siervos perfectos. 
•  
• Nunca has de renunciar al privilegio de salvar tu alma. 
• Oh Cristo Redentor, 
• tu sacrificio en la cruz del Calvario nos ha llevado a creer en el que sana, 
• por la magnificencia de su piadoso amor.
•  
• La santidad se ve sobredimensionada,
• oh Cristo Salvador,
• por tu paz que sobrenaturalmente nos es dada.
• Y no hay provisión, sino la del Padre eterno, que del universo es el único Creador.
•                       Paz de Cristo 

MALAQUÍAS 3:17,18 EN CRISTO

• Y serán para mí especial tesoro, ha dicho Jehová de los ejércitos, en el día en que yo actúe; y los perdonaré, como el hombre que perdona al hijo que le sirve.
• Entonces os volveréis y discerniréis la diferencia entre el justo y el malo, entre el que sirve a Dios y el que no le sirve. 
• Oh mi Cristo, de toda atadura, Tú serás el que nos libre;
• porque desde antes de la fundación del mundo, como tus hijos nos escogiste. 
• 
  
• La Biblia dice: Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta. Él dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no lo ejecutará?
• He aquí, he recibido orden de bendecir; Él dio bendición, y no podré revocarla. 
• Oh gran Yo Soy, cada infalible promesa tu diestra hará, 
• y es que, hasta la última jota y tilde, oh Señor, se cumplirá en tu Sagrada Palabra. 
• 
  
• La Biblia enseña: Desde el principio tú fundaste la tierra, y los cielos son obra de tus manos.
• Ellos perecerán, mas tú permanecerás; y todos ellos con una vestidura se envejecerán; con un vestido los mudarás, y serán mudados; pero tú eres el mismo, y tus años no se acabarán. 
• Oh Cristo Redentor, en tu inmutabilidad nos guardamos, 
• los mismos que en el eterno paraíso morarán.
•  
• La Biblia constata: Y ya no estoy en el mundo; mas éstos están en el mundo, y yo voy a ti. Padre santo, a los que me has dado, guárdalos en tu nombre, para que sean uno, así como nosotros. 
• Cuando yo estaba con ellos en el mundo, yo los guardaba en tu nombre; a los que me diste, yo los guardé, y ninguno de ellos se perdió, sino el hijo de perdición, para que la Escritura se cumpliese.
• Oh Rey de reyes, la gloria de Dios se nos ha manifestado en los caminos más adversos,
• para ser tus perfectos testigos, y nuestra alma en ti permaneciese.
• 
  
• La Biblia asevera: Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos. 
• Nada nos impedirá, oh Soberano Salvador, seguir tu glorioso camino.
• Y tenemos el grandioso privilegio de ser tus hijos;
• porque en el nombre que es sobre todo nombre, hemos recibido el sagrado bautismo. 
•                   Paz de Cristo 

EZEQUIEL 18:21,22 EN CRISTO

• Mas el impío, si se apartare de todos sus pecados que hizo, y guardare todos mis estatutos e hiciere según el derecho y la justicia, de cierto vivirá; no morirá. 
• Todas las transgresiones que cometió, no le serán recordadas; en su justicia que hizo vivirá. 
• Grandiosa es la misericordia de Jehová, 
• al ofrendar al pecador una gloriosa puerta, que solo Él abrirá. 
• 
  
• Oh Rey de reyes, 
• conmovedora piedad derramas sobre tu obra maestra.
• Celestiales son tus prodigiosos bienes;
• que dan gracia, cuando procede al arrepentimiento la inicua humanidad, galardonándola con el poder de salvación de su excelsa diestra. 
• 
  
• Oh Sumo Hacedor, creaste la tierra y su exuberante plenitud,
• para que por el hombre fuera sojuzgada.
• Y con la humana altivez, puso los ojos en las tinieblas, desaprobando la luz,
• para que la obscuridad su alma asolara.
• 
  
• Oh Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, 
• tu Palabra es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos. 
• Y has querido, oh Alfa y Omega, que por la verdad del Santo Espíritu, 
• seamos tus aprobados y dignos hijos.
• 
  
• Oh Rey de la Gloria, 
• somos siervos de tu sagrada senda. 
• Y alcanzaremos la final victoria, 
• oh Soberano Salvador, si nos arrebatas con tu Iglesia eterna.
•                       Paz de Cristo 

EL SER HUMANO, NO SE AFIRMA EN TU VOLUNTAD, OH CRISTO

• Oh Cristo, tal es el estricto límite de la humanidad, 
• que le condiciona la errática respuesta de su corazón. 
• Oh Alto y Sublime, es siempre tu santa voluntad,
• la que se impone sobre nuestra sinrazón. 
• 
  
• Oh Altísimo Señor, 
• el ser humano se mueve sometido a la mentira. 
• Y en este abismal desamor, 
• está su alma concernida. 
• 
  
• Oh Santo de Israel,
• tú viniste a deshacer las obras del diablo. 
• Y en la fuente de tu Sagrada Palabra, sacia el pobre de espíritu su sed;
• porque, oh Rey de la gloria, en tu nombre se ha santificado. 
• 
  
• Oh Rey de reyes y Señor de señores, 
• cada mañana son nuevas tus misericordias. 
• Y por tus gloriosos favores, 
• han salido del pozo hediondo las almas que en el obscurantismo estaban irremisiblemente sumidas.
• 
  
• Jesús, dijo: El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí. 
• El que halla su vida la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará. 
• No cometas la gran necedad de confiar en ti;
• permite que el Altísimo Señor Jesucristo, dirija tus titubeantes pasos; y su perfecta gloria, en tu vida se manifestará. 
•                   Paz de Cristo 

ECLESIASTÉS 9:1,2 EN CRISTO

• Ciertamente he dado mi corazón a todas estas cosas, para declarar todo esto: que los justos y los sabios, y sus obras, están en las manos de Dios; que sea amor o sea odio, no lo saben los hombres; todo está delante de ellos.
• Todo acontece de la misma manera a todos; un mismo suceso ocurre al justo y al impío; al bueno, al limpio y al no limpio; al que sacrifica, y al que no sacrifica: como al bueno, así al que peca; al que jura, como al que teme el juramento. 
• Oh Cristo, no habrá acepción de personas, en tus justos juicios,
• porque Tú eres el Fundamento. 
• 
  
• Oh Alfa y Omega, 
• en la indolencia del ser humano, ha lugar su necedad.
• Y hasta su alma descuida, 
• haciendo caso omiso de la santísima verdad.
•  
• Oh Alto y Sublime, 
• por tu Espíritu, tus genuinos hijos hemos sido engendrados. 
• Y ha de tener cuidado de no caer, el que esté firme, 
• para traspasar el umbral de los bienaventurados. 
• 
  
• Oh Fiel y Verdadero, 
• de tu gracia somos fieles testigos.
• Y los que perseveren hasta el día postrero, 
• morarán, oh Señor, con tus glorificados discípulos.
• 
  
• Oh Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, 
• La convicción de haber pecado, se nos ha hecho manifiesta en tu presencia. 
• Y la verdad del Santo Espíritu, 
• es el camino angosto, que nos ha de llevar a tu gloriosa excelencia. 
•                    Paz de Cristo 

2 SAMUEL 22:31,32 EN CRISTO

• En cuanto a Dios, perfecto es su camino, y acrisolada la palabra de Jehová. Escudo es a todos los que en él esperan. 
• Porque ¿quién es Dios, sino sólo Jehová?
• Oh Cristo, ¿cuántos corazones tus pruebas superan?
• Nada como tu crisol nos refinará. 
• 
  
• Oh Cordero inmolado, en la cruz del Calvario, 
• nos diste ejemplo de a lo que nos hemos de enfrentar.
• Porque para traspasar, oh Señor, el umbral del santuario,
• nuestra alma en tu piedad se ha de guardar. 
• 
  
• Oh Cristo Redentor,
• en tu nombre, no existen excusas para el fingimiento. 
• Porque, oh gran Yo Soy, de tu excelso amor,
• se ha desbordado el firmamento. 
• 
  
• Oh Santo de Israel, 
• ¿qué merecimientos haremos para ser los elegidos del paraíso?
• ¡Oh Rey de la gloría, auméntanos la fe!
• Y en santidad, seremos en el día postrero, arrebatados a la gloria contigo. 
•  
• La Biblia dice: Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.
• Los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad. 
• Nada sucederá que la Biblia no expresa;
• pero para ser salvo has de saber, que tu corazón ha de santificarse en la sagrada verdad.
•                    Paz de Cristo 

NO ES EN MI TIEMPO, SINO EN TU TIEMPO, OH CRISTO

• Oh Cristo, todo lo que ha de acontecer en el tiempo del ser humano, Tú ya lo conoces.
• Y obedecerá todo nuestro devenir, a la oración que elevemos en tu santo nombre. 
• Orarás sin cesar, desde que te levantes, hasta que te acuestes;
• porque así, tu sueño en Él, será verad para siempre.
• 
  
• Oh Cristo Jesús, 
• tus misericordias nos guardan cada segundo de nuestra vida.
• Y por tu inaccesible luz, 
• somos bendecidos cada día. 
• 
  
• Oh Cristo Redentor, 
• en tu gracia suplimos toda necesidad. 
• Y acrisolados en tu amor,
• hemos proscrito, oh Rey de reyes, la perniciosa vanidad. 
• 
  
• Jesús, dijo: Sed santos, porque yo soy santo.
• Para tus verdaderos siervos, oh Alfa y Omega, este mandato no es una opción.
• En nuestra humillación, habremos de menguar tanto,
• que el primoroso fruto del alma, indefectiblemente será el perdón.
• 
  
• Jesús, enseña: Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.
• Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. 
• Oh Fiel y Verdadero, Tú eres el principio y el fin;
• y ya no andamos por vista, sino por fe.
•                  Paz de Cristo 

ISAÍAS 40:25,26 EN CRISTO

• ¿A qué, pues, me haréis semejante o me compararéis? dice el Santo. 
• Levantad en alto vuestros ojos, y mirad quién creó estas cosas; él saca y cuenta su ejército; a todas llama por su nombre; ninguna faltará; tal es la grandeza de su fuerza, y el poder de su dominio.
• Oh mi Cristo, en tu excelsa diestra has dado cabida al infinito universo, palmo a palmo;
• y llamar a todas las estrellas por su nombre, forma parte, oh Señor, de tu majestuoso prodigio.
•  
• La Biblia dice: ¿Quién enseñó al Espíritu de Jehová, o le aconsejó enseñándole?
• ¿A quién pidió consejo para ser avisado? ¿Quién le enseñó el camino del juicio, o le enseñó ciencia, o le mostró la senda de la prudencia?
• Los gloriosos mimbres de la eternidad no pueden sustentarle;
• porque hasta en lo más ignoto es manifiesta su presencia. 
•  
• La Biblia enseña: Él convierte en nada a los poderosos, y a los que gobiernan la tierra hace como cosa vana.
• Como si nunca hubieran sido plantados, como si nunca hubieran sido sembrados, como si nunca su tronco hubiera tenido raíz en la tierra: tan pronto como sopla en ellos se secan, y el torbellino los lleva como hojarasca. 
• Oh Sumo Hacedor, una exigua porción de la humanidad tendrá conocimiento de tu creación santa;
• y es que, en el Lugar Santísimo, todo corazón perverso, oh Soberano Señor, a tus pies no se quebranta. 
• 
  
• ¿Sabrá el ser inicuo a lo largo de su existencia, que el Altísimo Señor Jesucristo puede salvar su alma?
• ¿O su endurecido corazón le impide, oh Rey de reyes, que tu admirable luz supla sus tinieblas?
• ¡Jesús te ama!
• No hagas más desdén de sus favores y misericordias. 
• 
  
• Jesús, dijo: He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo. 
• Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono. 
• Del Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, has de ser irreprensible testigo, 
• para predicar con unción la sana doctrina del Eterno. 
•                    Paz de Cristo 

SALMO 1:1-3 EN CRISTO

• Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, ni estuvo en camino de pecadores, ni en silla de escarnecedores se ha sentado; sino que en la ley de Jehová está su delicia, y en su ley medita de día y de noche. 
• Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, que dan su fruto en su tiempo, y su hoja no cae; y todo lo que hace, prosperará.
• En tu vida tienes inmenso gozo, cuando asumes que cada una de tus vicisitudes de Dios depende;
• y que, en el cumplimiento de su Palabra, pacientemente tu alma espera.
• 
  
• Así ha dicho Jehová: Maldito el varón que confía en el hombre, y pone carne por su brazo, y su corazón se aparta de Jehová. 
• Será como retama en el desierto, y no verá cuando viene el bien, sino que morará en los sequedales en el desierto, en tierra despoblada y deshabitada.
• Oh Sumo Hacedor, nuestro ser tu gracia recibirá, 
• para que nunca nos desviemos por la senda equivocada. 
• 
  
• La Biblia dice: ¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!
• ¡Ay de los sabios en sus propios ojos, y de los que son prudentes delante de sí mismos!
• Oh Rey de la gloria, en los que del fingimiento, hacen su moneda de cambio, 
• se abren una insolente vereda hacia los abismos. 
• 
  
• La Biblia enseña: Por lo cual, levantad las manos caídas y las rodillas paralizadas; y haced sendas derechas para vuestros pies, para que lo cojo no se salga del camino, sino que sea sanado. 
• Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. 
• Oh Cristo Redentor, Tú venciste al imperio de la muerte con tu muerte, y redimiste, y justificaste nuestro pecado;
• pero para que el alma sea salva, ha de guardarse incorruptible en tu eterno amor. 
•  
• Oh Soberano Señor y Salvador Jesucristo,
• de una forma misteriosa me revelaste tu nombre. 
• Mis pensamientos de bien, nunca contristarán al Santo Espíritu;
• porque del lino de los santos, me ha revestido para siempre. 
•                   Paz de Cristo 

JUAN 3:19,20 EN CRISTO

• Y ésta es la condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas.
• Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas.
• Oh mi Cristo, el Evangelio de la gracia tiene un fin excelso: santificar a las almas, 
• para que por el maligno no sean entenebrecidas. 
• 
  
• La Biblia dice: Y sabéis que él apareció para quitar nuestros pecados, y no hay pecado en él. 
• Todo aquel que permanece en él, no peca; todo aquel que peca, no le ha visto, ni le ha conocido.
• Oh Cristo Redentor, en la cruz del Calvario, antes de expirar, dijiste: Consumado es. 
• Oh Cordero inmolado, en tu crucifixión voluntaria, por ti que eres el autor y consumador de la fe, todo pecado de tus verdaderos siervos ha sido justificado y redimido. 
• 
  
• La Biblia enseña: Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no provienen del Padre, sino del mundo.
• Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre. 
• Sal del vil estado moribundo, 
• y las bendiciones de lo alto vendrán a socorrerte.
• 
  
• La Biblia asevera: Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. 
• Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. 
• Oh Altísimo Señor Jesucristo, 
• con tu Sagrada Palabra nos has saciado espiritualmente.
• 
  
• Jesús, dijo: Yo soy el buen pastor; y conozco a mis ovejas, y las mías me conocen, así como él Padre me conoce, y yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas. 
• También tengo otras ovejas que no son de este redil; aquéllas también debo traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño y un pastor. 
• Oh Rey de reyes y Señor de señores, hemos creído fervientemente en tus promesas;
• porque, oh gran Yo Soy, Tú eres nuestro Todopoderoso Señor y Salvador. 
•                   Paz de Cristo 

TÚ DAS Y QUITAS, OH CRISTO

• La Biblia dice: Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni él tienta a nadie; sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido. 
• Entonces la concupiscencia, después que ha concebido, da a luz al pecado; y siendo consumado, da a luz la muerte.
• Tú eres el Cordero que quita el pecado del mundo, oh Cristo. 
• Y tu excelsa diestra, nos bendice eternamente.
• 
  
• La Biblia enseña: A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. 
• Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios. 
• Oh Sumo Creador, ningún impedimento ha habido, para que te siguieran los que tu Sagrada Escritura conocieron; 
• y se convirtieran, oh Señor, en tus genuinos siervos.
•  
• Jesús, dijo: El que venciere será vestido de vestiduras blancas; y no borraré su nombre del libro de la vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre, y delante de sus ángeles. 
• El que tenga oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. 
• Oh Soberano Redentor, en la cruz del Calvario, clavaste las actas que nos inculpaban como pecadores, 
• y redimiste y justificaste todos los abyectos delitos de nuestras execrables vidas. 
• 
  
• La Biblia constata: Entonces Job se levantó, y rasgó su manto, y rasuró su cabeza, y se postró en tierra y adoró, y dijo: Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré allá. 
• Jehová dio, y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito. 
• Oh Fiel y Verdadero, únicamente en tu Sagrada Palabra, la gloria se manifestará;
• porque no volverá a ti vacía, sino que cumplirá su propósito. 
• 
  
• Jesús, asevera: He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra. 
• Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin, el primero y el último. 
• No sabemos ni el día, ni la hora;
• pero el Señor Jesucristo arrebatará a su amada Iglesia, porque Él es el Dios único. 
•                    Paz de Cristo 

NO HAY SABIDURÍA DE LO ALTO, SINO EN CRISTO

• La Biblia dice: Amados hermanos míos, no erréis. 
• Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación. 
• Nada que no sea del Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, secundéis;
• porque endurecerá ilimitadamente vuestro corazón. 
•  
• Oh Cristo Jesús, 
• Tú nos predicaste las buenas nuevas de salvación eterna. 
• Y por haber creído en ellas, hemos encontrado la gloriosa plenitud, 
• que anunciaremos hasta lo último de la tierra. 
• 
  
• Oh Soberano Señor Jesucristo, infinitas gracias, por haberme dado la sobrenatural misión de predicar poéticamente tu Sagrada Palabra. 
• Gracias, Sumo Redentor, por haber hecho propicio en mí, tu Santo Espíritu, 
• que en sembrar lo espiritual de lo espiritual, siempre me acompaña. 
• 
  
• Oh Altísimo Señor Jesucristo, Tú eres el que me envías el mensaje poético de tu santo Evangelio. 
• Y me das gracia, para transcribirlo en un lenguaje audible, a través del cual te conozca la indolente humanidad.
• Porque no existe mayor privilegio, 
• que guardarnos en tu majestuosa verdad .
• 
  
• Y es que, oh gran Yo Soy, 
• al compartir tu Sagrada Escritura, damos testimonio de tu nombre que es sobre todo nombre. 
• Y salvo será, oh Señor Jesús, el que cree a día de hoy,
• que Tú eres Dios manifestado en carne, para darte gloria y honra eternamente. 
•                    Paz de Cristo 

MATEO 12:36,37 EN CRISTO

• Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio.
• Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado. 
• Tus sentencias son indubitablemente justas, oh mi Cristo. 
• Y serán de confusión y vergüenza por la eternidad para el inicuo, y de gloria eterna para el bienaventurado. 
•  
• Oh Cordero inmolado, Tú eres el autor y consumador de la fe;
• y les recriminaste a los apóstoles su incredulidad.
• No hay dificultad mayor, que tener certeza sobre lo que no se ve;
• pero la duda nuca existirá, para el que recibe gracia del Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, y cree en su eterna verdad. 
• 
  
• La Biblia dice: Porque Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo. 
• Pero tenemos este tesoro en vaso de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros, que estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperados; perseguidos, mas no desamparados; derribados, pero no destruidos; llevando en el cuerpo siempre por todas partes la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestros cuerpos. 
• Oh Santo Espíritu, 
• de tu Sagrada Palabra somos heraldos verdaderos e impertérritos. 
• 
  
• La Biblia enseña: Y vinieron los discípulos y le despertaron, diciendo: ¡Señor, sálvanos, que perecemos!
• Él les dijo: ¿Por qué teméis, hombres de poca fe? Entonces, levantándose, reprendió a los vientos y al mar; y se hizo grande bonanza. 
• Oh Cristo Redentor, por la fe en tu santo nombre, todo lo resolvemos; 
• porque manifiesta es en nuestro ser, oh Señor, tu bienaventuranza. 
•  
• Jesús, dijo: Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.
• Oh Sumo Creador, antes de la fundación del mundo, escogiste a tu amada Iglesia.
• Nada será impedimento, oh Rey de la gloria, para que a tus consagrados discípulos los sustenten tus eternos mimbres.
• Y que ilumine nuestros corazones, la estrella resplandeciente de la mañana, en el estruendoso toque de la final trompeta.
•                      Paz de Cristo 

SALMO 51:10,11 EN CRISTO

• Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí. 
• No me eches de delante de ti, y no quites de mí tu santo Espíritu. 
• Tu santidad ha de ceñirme hasta el postrero fin,
• oh mi Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo. 
•  
• La Biblia dice: Dios desde los cielos miró sobre los hijos de los hombres, para ver si había algún entendido que buscara a Dios. 
• Cada uno se había vuelto atrás, todos se habían corrompido; no hay quien haga lo bueno, no hay ni aun uno.
• ¿Por qué los pensamientos del ser humano son tan depravados?
• ¡Nadie le sustentará, sino Tú, oh Señor, de caer en el abismo!
•  
• La Biblia enseña: Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego. 
• Así que, por sus frutos los conoceréis. 
• Habréis de perseverar en la perfecta senda del santo Evangelio;
• de otra forma pereceréis. 
• 
  
• La Biblia enfatiza: Porque no quieres sacrificio, que yo lo daría; no quieres holocausto. 
• Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios. 
• Oh Cristo Redentor, despega mi vida del mundo fatuo;
• porque la sagrada gloria, es de tus verdaderos siervos.
•  
• Oh Rey de la gloria, 
• la salvación es individual. 
• Y en la santa libertad está concernida tu victoria,
• que es la eterna Jerusalén celestial. 
•                     Paz de Cristo 
• 
  

SOLO TÚ HACES JUSTICIA, JUSTICIA INFALIBLE, OH CRISTO

• Jesús, dijo: Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido.
• De manera que cualquiera que quebranta uno de estos mandamientos muy pequeños, y así enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los cielos; mas cualquiera que los haga y los enseñe, éste será llamado grande en el reino de los cielos. 
• Y es que, para el gran Yo Soy nada pasará inadvertido;
• porque para Él, mil años es un día, y un día son mil años. Y hasta los pelos de tu cabeza tiene contados. 
•  
• La Biblia dice: El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo. 
• Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios. 
• Oh Cristo Redentor, tu inaccesible luz nos ha engendrado,
• para ser tus irreprensibles siervos. 
•  
• La Biblia enseña: Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo, y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe; a fin de conocerle, y el poder de su resurrección, y la participación de sus padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte, si en alguna manera llegase a la resurrección de entre los muertos. 
• No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús. 
• Oh Rey de la gloria, a tu eterno santuario estamos sujetos; 
• y nuestro espíritu se quebranta a tus santísimos pies, de sagrada plenitud. 
• 
  
• La Biblia asevera: Los ojos de Jehová están sobre los justos, y atentos sus oídos al clamor de ellos. 
• La ira de Jehová contra los que hacen mal, para cortar de la tierra la memoria de ellos.
• Oh Alfa y Omega, a la estatura del varón perfecto, por tu gracia llegaremos; 
• y en su santa voluntad, salvos seremos. 
• 
  
• La Biblia enfatiza: Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios.
• Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.
• Y sabemos que todos los seres humanos a la sana doctrina consagrados,
• les ha sido revelado tu nombre, oh Rey de reyes, por la infalible justicia de la fe.
•                      Paz de Cristo 

SALMO 135:15-18 EN CRISTO

• Los ídolos de las naciones son plata y oro, obra de manos de hombres. 
• Tienen boca y no hablan; tienen ojos, y no ven; tienen orejas, y no oyen; tampoco hay aliento en sus bocas.
• Oh mi Cristo, los demonios han ideado estatuas tan abominables,
• que son a todo principio bíblico diametralmente contrarias. 
• 
  
• Oh Altísimo Redentor, es tal la iniquidad del ser humano,
• que distorsiona hasta lo inimaginable el texto de la Sagrada Palabra. 
• Y vuelca sobre las almas el ideario profano,
• hasta hacer de su predicación la mentira más perversa.
• 
  
• La Biblia dice: No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que está arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. 
• No te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen, y hago misericordia a millares, a los que aman y guardan mis mandamientos. 
• Nadie tomará tu nombre en vano, oh Rey de la gloria,
• porque irremisiblemente serán de condenación sus viles pensamientos. 
• 
  
• La Biblia enseña: Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. 
• Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. 
• Oh Sumo Hacedor, nada le es impedimento a la fatua humanidad, para que la Sagrada Escritura propicie su salvación.
• No por obras, para que nadie se gloríe; porque por gracia sois salvos, por medio de la fe.
•  
• Oh Cordero inmolado,
• el nuevo pacto de la gracia, nos fue dado por el derramamiento de tu preciosa sangre derramada en la cruz del Calvario  
• Y el que con quebrantamiento de espíritu, se postre a tus pies, oh Señor, será bienaventurado;
• si tu majestuosa voluntad, le permite traspasar la puerta del eterno santuario. 
•                    Paz de Cristo 

A ANA EN CRISTO

• Estimada Ana, 
• todos tus preciosos momentos en Cristo son irrepetibles. 
• Cristo Jesús te ama.
• Y tus sentimientos por Él, han sido por su gracia, que en tu espíritu fueran invencibles. 
•  
• El fragante perfume de la rosa, 
• es la oración de los que son santos en el Señor. 
• Porque el que sin cesar ora,
• se ve revestido por su inmarcesible amor. 
• 
  
• Querida Ana,
• la paz del Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, sobrepasa todo entendimiento. 
• Y en su nombre que es sobre todo nombre, Él te sana,
• para traspasar la puerta del firmamento. 
•                  Paz de Cristo 

A ANA EN EL AMOR DE CRISTO

• Estimada Ana,
• cada momento de tu vida es irrepetible en Cristo. 
• Porque Él siempre te ama, 
• con la pureza del Santo Espíritu. 
•  
• El fragante aroma de la rosa, 
• te eleva con sus alados pétalos de eternidad.
• Oh Cristo Redentor, nada es tan perfecto como tu gloria,
•  al ser el sagrado refugio de la santísima verdad. 
• 
  
• Ana, en el amor de Cristo Jesús, 
• encontrarás la genuina paz.
• Porque únicamente en su majestuosa luz,
• se hace visible la santa faz.
•                  Paz de Cristo 

LO EXECRABLE, ANTÍTESIS DE TU EXCELSA DIESTRA, OH CRISTO

• Oh Cristo, cuando uno interioriza lo perfecto de la creación,
• la fe se sobredimensiona, oh Soberano Señor, en tu manifestación en carne. 
• Y es que, oh Hijo del Hombre, tu ministerio público, vivifica a tal extremo al corazón; 
• que la gracia de tu preciosa sangre derramada en el Calvario es salvación, para el que en tu nombre cree eternamente.
•  
• Oh Alfa y Omega, 
• Tú eres el primero y el último, el principio y el fin.
• Y de tu excelsa diestra, 
• pende nuestro eterno y glorioso existir.
•  
• Oh Cristo Jesús,
• únicamente las mentes fatuas, 
• han determinado que en su entenebebrecido ser, no se haga visible, oh Señor, tu admirable luz;
• porque en la obscuridad ignominiosa, permanecen sus endemoniadas almas.
•  
• Jesús, dijo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.
• Y también: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto vivirá. 
• Oh Alto y Sublime, tu gloria en nuestra inmortalidad está indefectiblemente concernida; 
• y ninguna execrable necedad, de ella nos apartará. 
• 
  
• Oh Todopoderoso Señor Jesucristo, solo el que no tiene conocimiento de la Sagrada Escritura, 
• hace desdén de la salvación del alma. 
• Y así, el ser humano en su empecinamiento nunca sabrá, qué es ser en Cristo nueva criatura,
• para morar en la nueva Jerusalén eterna.
•                     Paz de Cristo 

NO HAY BONDAD, SINO EN CRISTO

• No existe en la tierra ningún espacio,
• donde no se manifieste tu gloriosa bondad, oh Cristo. 
• Es tal la grandeza de tu sobrenatural beneplácito, 
• que nos has dado el poder de lo alto, por la gracia de tu Santo Espíritu.
• 
  
• La Biblia dice: Acuérdate, oh Jehová, de tus piedades y de tus misericordias, que son perpetuas.
• De los pecados de mí juventud, y de mis rebeliones, no te acuerdes; conforme a tu misericordia acuérdate de mí, por tu bondad, oh Jehová.
• Oh Cristo Redentor, sé propicio, para que vean tu rostro las escogidas almas eternas,
• que a sus nombres, oh Señor, tu excelsa diestra glorificará.
• 
  
• La Biblia enseña: ¿Quién permanecerá delante de su ira? ¿quién quedará en pie en el ardor de su enojo? Su ira se derramará como fuego, y por él se hienden las peñas.
• Jehová e bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían. 
• La deliberada oposición con el Omnipotente, te arrastrará al infierno de llamas perpetuas.
• 
  
• La Biblia constata: Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia, por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia; vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal: y al afecto fraternal, amor.
• Porque si estas cosas están en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor Jesucristo. 
• Oh Soberano Salvador, 
• por tu gracia estamos consagrados, y somos probos discípulos en la verdad del Santo Espíritu.
• 
  
• La Biblia asevera: Y Jehová será rey sobre toda la tierra. En aquel día Jehová será uno, y uno su nombre. 
• Entonces la doctrina de Unicidad doblegará, por fin, a las herejes e incrédulas naciones. 
• Y sabrán meridianamente, 
• que Jesucristo es el gran Yo Soy; y que la humanidad solo será salva, cuando reciba la unción de sus eternas bendiciones.
•                      Paz de Cristo 

FILIPENSES 4:4,5 EN CRISTO

• Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos!
• Vuestra gentileza sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca.
• Oh mi Cristo, de tu gozo hemos de ser heraldos,
•  para predicar hasta los confines de la tierra tu gloriosa promesa.
•  
• La Biblia dice: Estad siempre gozosos. 
• Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo. 
• Oh Fiel y Verdadero, a tus pies permaneceremos postrados, 
• dándote la gloria con el quebrantamiento de espíritu. 
•  
• Así ha dicho Jehová, Redentor tuyo, el Santo de Israel: Yo soy Jehová Dios tuyo, que te enseña provechosamente, que te encamina por el camino que debes seguir. 
• ¿Oh, si hubieras atendido a mis mandamientos! Fuera entonces tu paz como un río, y tu justicia como las ondas del mar. 
• Oh Cristo Jesús, tu excelsa diestra será mi refugio hasta el fin;
• y es que, únicamente en tu nombre, mi santidad podré guardar. 
• 
  
• La Biblia enseña: Porque contigo está el manantial de la vida; en tu luz veremos la luz.
• Extiende tu misericordia a los que te conocen, y tu justicia a los rectos de corazón. 
• Oh Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, tu gozo es la grandiosa fortaleza de nuestra plenitud;
• porque en la cruz del Calvario, nos ofrendaste tu majestuoso perdón.
•                    Paz de Cristo 

PROVERBIOS 26:14,15 EN CRISTO

• Como la puerta gira sobre sus quicios, así el perezoso se vuelve en su cama. 
• Mete el perezoso su mano en el plato; se cansa de llevarla a su boca.
• Toda percepción del ser humano, en sí misma es vana;
• porque alienado por su obsceno entendimiento, ante lo más vil se postra de forma ignominiosa.
•  
• Oh Cristo, 
• guárdanos de los que profanan tus preceptos bíblicos.
• Porque solo en tu Sagrado Escrito, 
• se cumplen los sobrenaturales principios.
• 
  
• Oh Cristo Jesús, 
• ¿quien llevó a cabo la abyecta idea de idolatrar?
• ¿Es qué, tal vez, obvió la revelación, oh gran Yo Soy, de tu admirable luz;
• y amó, en su enajenación, al ídolo que nunca hubo de amar?
• 
  
• Oh Santo de Israel, 
• de la perversión del diablo subyacen todos los ídolos. 
• Y postrados en adoración a los pies del autor y consumador de la fe, 
• han de resistirlos, oh Rey de la gloria, tus verdaderos discípulos. 
• 
  
• Oh Fiel y Verdadero, 
• la salvación es el mayor bien que has ofrendado a la humanidad.
• Y con tu amada Iglesia seremos arrebatados en el día postrero;
• por haber sido los firmes atalayas de la gloriosa verdad. 
•                     Paz de Cristo 

1 JUAN 4:1-3 EN CRISTO

• Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo.
• En esto conoced el Espíritu de Dios: Todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios; y todo espíritu que no confiesa que Jesucristo ha venido en carne, no es de Dios; y este es el espíritu del anticristo, el cual vosotros habéis oído que viene, y ahora ya está en el mundo.
• Oh Cristo Jesús, la cobardía es propia del impostor que vive en estado moribundo; 
• porque en su impiedad se manifiesta lo depravado y nauseabundo. 
•  
• La Biblia dice: Bendito el varón que confía en Jehová, y cuya confianza es Jehová. 
• Porque será como el árbol plantado junto a las aguas, que junto a la corriente echará sus raíces, y no verá cuando viene el calor, sino que su hoja estará verde; y en el año de sequía no se fatigará, ni dejará de dar fruto.
• El que ama a Dios, de todo lo indigno le preservará;
• porque en la verdad de su corazón, vive el Santo Espíritu. 
• 
  
• La Biblia enseña: Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?
• Yo Jehová, que escudriño la mente, que pruebo el corazón, para dar a cada uno según su camino, según el fruto de sus obras. 
• Oh Altísimo Señor Jesucristo, el impío que finge sin escrúpulos, nunca te engañará;
• porque el corazón del desalmado, oh Alfa y Omega, será pesado con la justicia de tus balanzas sagradas. 
• 
  
• ¿Piensas qué con los rudimentos de tu ignorancia, podrás burlar al que padeció el mayor suplicio en la cruz del Calvario, 
• para redención de la obscena humanidad?
• ¡Oh Soberano Redentor, nada de lo que Tú creaste en tu glorioso santuario, 
• se desdice o es contrario a la santísima verdad!
• 
  
• La Biblia constata: Como el padre se compadece de los hijos, se compadece Jehová de los que le temen.
• Porque el conoce nuestra condición; se acuerda de que somos polvo.
• Oh Todopoderoso Salvador, únicamente los carentes de sabiduría se envanecen;
• no reconociendo que sin tu gracia, oh Señor, nada puede hacer el ser humano arrogante, altivo y fatuo.
•                    Paz de Cristo 

TU AYUDA SE MULTIPLICA EXPONENCIALMENTE EN CRISTO

• Jesús, dijo: Más bienaventurado es dar que recibir.
• El corazón piadoso ante toda injusticia se manifiesta.
• Y en tu siembra espiritual has de persistir,
• para que por fe en el Todopoderoso, dé fruto en su sazón perfecta. 
• 
  
• Cuida al escudriñar la Sagrada Escritura, 
• que no se trufe de un pensamiento adulterado.
• Oh mi Cristo, en tu nombre se es nueva criatura,
• para seguir, a partir de ese instante, el camino del bienaventurado. 
• 
  
• Oh Fiel y Verdadero, la sombra infecta del enemigo,
• nos dificulta al extremo ver tu senda de gloria. 
• Y puede llegar a tal extremo tu obnubilación, que dejas de ser en Cristo su verdadero testigo,
• para darle al diablo una perversa victoria.
• 
  
• Velad y orad sin cesar, 
• para que la sabiduría de lo alto os impida traspasar la fina línea de la transgresión bíblica. 
• Comprobad si la dureza de corazón ha disipado la grandiosidad de amar,
• y habéis caído en la mentira más séptica. 
• 
  
• La puerta del cielo siempre está abierta a la excelencia de dar;
• tú eres un atalaya del Altísimo Señor Jesucristo, desde la eternidad y hasta la eternidad. 
• Pon tu mano en el timón de arado, y haz rectos los surcos donde la gloriosa semilla de la Palabra has de sembrar;
• porque ahí, indefectiblemente está la santísima verdad.
•                    Paz de Cristo 

¿QUIÉN ES TU GENUINO DISCÍPULO, OH CRISTO?

• El ser humano por su voluble espíritu, 
• nunca podrá, oh Señor, en el abismal deterioro de su disoluta naturaleza, asumir el cumplimiento de la Sagrada Palabra. 
• Oh Altísimo Señor Jesucristo, 
• para consumar los bíblicos preceptos de forma irreprensible, tus siervos tendrán que negarse a sí mismos, guardando absoluta fidelidad al Evangelio de la gracia. 
• 
  
• Porque vivir en la falacia del pecador, 
• nunca nos abrirá la puerta de tu gloria, oh Santo de Israel. 
• Vestíos con el lino del eterno resplandor, 
• que es el sobrenatural don de la fe.
• 
  
• Cíñeme, oh Altísimo Señor Jesucristo, 
• con tu celestial paz.
• Y mi inexpugnable fortaleza será el gozo del Santo Espíritu, 
• para que el blindaje del alma sea consubstancial a su sagrada verdad.
• 
  
• En las profundidades del desierto,
• es donde percibe nuestra alma una sed inusitada.
• Oh Todopoderoso Salvador, haz que tus ríos de agua viva, den exuberante fertilidad al que en tu santo nombre se hizo converso,
• para que se regocije en la gracia bienaventurada.
• 
  
• Jesús, dijo: Porque, ¿cuál es mayor, el que se sienta a la mesa, o el que sirve? ¿No es el que se sienta a la mesa? Mas yo estoy entre vosotros como el que sirve.
• Pero vosotros sois los que habéis permanecido conmigo en mis pruebas.
• Oh Soberano Creador, tu genuino discípulo es el que toma su cruz y te sigue;
• porque únicamente en santidad, hollará, oh Rey de la gloria, tus eternas huellas.
•                      Paz de Cristo 

SALMO 3:3,4 EN CRISTO

• Mas tú, oh Jehová, eres escudo alrededor de mí; mi gloria, y el que levanta mi cabeza.
• Con mi voz clamé a Jehová, y él me respondió desde su monte santo. 
• Siempre confiaré, oh Señor, en tu sobrenatural omnisciencia;
• porque a mi plegaria has dado la gloriosa respuesta de lo alto.
• 
  
• Jesús entonces, enseñando en el templo, alzó la voz y dijo: A mi me conocéis, y sabéis de donde soy; y no he venido de mí mismo, pero el que me envió es verdadero, a quien vosotros no conocéis. 
• Pero yo le conozco, porque de él procedo, y él me envió. 
• Porque los que en el gran Yo Soy, creéis;
• por su poder, ha propiciado salvación a vuestras almas; porque para Él os apartó.
• 
  
• La Biblia dice: Yo, yo Jehová, y fuera de mí no hay quien salve. 
• Yo anuncié, y salvé, e hice oír, y no hubo entre vosotros dios ajeno. Vosotros, pues, sois mis testigos, dice Jehová, que yo soy Dios. 
• Porque las asechanzas del maligno, de nuestras vidas las ha proscrito el Eterno,
• para de sus inmundicias salvaguardarnos.
• 
  
• Oh Alfa y Omega, 
• la prodigiosa magnificencia de tu creación,
• muestra la impactante evidencia, 
• de que en tu enésimo milagro es manifiesta la más absoluta y excelsa perfección. 
• 
  
• Oh Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, 
• sabemos, por tu Sagrada Palabra, que conoces todas y cada una de las vicisitudes de nuestra existencia.
• Y que por la gracia de tu Santo Espíritu, 
• tus verdaderos siervos, estamos unidos imperecederamente a tu presencia. 
•                  Paz de Cristo 

¿DAS FIEL TESTIMONIO EN CRISTO?

• Sujeta las bridas del alma,
• y revisa tus irreverentes acciones a los pies del Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo. 
• Él es el que más te ama; 
• pero tú contristas  perniciosamente a su Santo Espíritu.
• 
  
• Oh Omnipotente Redentor, 
• en la cruz del Calvario, tu preciosa sangre derramada nos dio gracia.
• ¿Será qué no es suficiente su majestuoso amor?
• ¿Y qué no te has estremecido al palpar su gloriosa llaga?
•  
• Oh Cristo Jesús, 
• no bastó con anunciar tu resurrección.
• Y ante el fulgor, oh Rey de la gloria, de tu sagrada luz,
• la fatua incredulidad se manifestó en vuestro endurecido corazón.
• 
  
• Oh Sumo Redentor, 
• antes de subir al cielo anunciaste la gran comisión. 
• Y es que, el siervo que da testimonio en tu nombre, lo ha de predicar con impoluto candor, 
• y grandiosa unción. 
•  
• Oh Alto y Sublime, 
• con verdadera adoración te servirá el discípulo fiel.
• Porque, oh Cordero inmolado, con tu santísima sangre,
• nos ofrendaste eterna vida en el abominable madero, el día aquel.
•                      Paz de Cristo 

¿PERCIBE EL HOMBRE LA PROBABILIDAD DE AGRADARTE, OH CRISTO?

• La Biblia dice: Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. 
• Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgarla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.
• Oh Altísimo Señor Jesucristo, la humanidad es linaje tuyo, y en tu nombre se dignificó.
• ¿Por qué dio pie al yerro de la desobediencia, y perdió la excelencia de su honra?
• 
  
• Oh Sumo Hacedor, 
• de tu magistral obra, el ser humano, nunca tuviste dudas;
• pero le diste libertad, y le concerniste la elección entre el bien y el mal, el amor y el desamor;
• que condicionarían irremisiblemente sus prodigiosas vidas. 
•  
• Oh Alfa y Omega, 
• ¿Por qué el ser humano, llevado por su codicia, ha tornado el gozo de la salvación en abyecta maldad?
• ¿O tal vez, es tan precaria su inteligencia,
• que no ha permitido a su alma hacerse permeable a la santísima verdad?
• 
  
• Oh Cordero inmolado, 
• ha lugar tanta dureza en el corazón de los seres humanos,
• para que ni tan siquiera uno pudiera ser bienaventurado, 
• y pudiera traspasar, oh Señor, el umbral de tus gloriosos cielos. 
•  
• La Biblia enseña: Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe. 
• Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas. 
• Oh Rey de la gloria, de lo alto has derramado tu gracia, para que nadie se desvíe;
• ¿pero estamos siendo, oh Rey de reyes, hijos irreprensibles; y hollando tus sagradas e incorruptibles huellas?
•                     Paz de Cristo 

2 TIMOTEO 2:23-26 EN CRISTO

• Pero desecha las cuestiones necias e insensatas, sabiendo que engendran contiendas. 
• Porque el siervo del Señor no debe ser contencioso, sino amable para con todos, apto para enseñar, sufrido; que con mansedumbre corrija a los que se oponen, por si quizá Dios les conceda que se arrepientan para conocer la verdad, y se escapen del lazo del diablo, en que están cautivos a voluntad de él. 
• Sé escéptico con los inconversos, que pretenden involucrarte en sus obsolescencias,
• porque ninguno de sus pensamientos, son consubstanciales a la bíblica fe.
• 
  
• La Biblia dice: Mas ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por fruto la santificación, y como fin, la vida eterna.
• Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro. 
• Únicamente sobre las tinieblas prevalece tu Palabra excelsa,
• que revierte con su majestuosa luz al que está asediado por el yermo desierto. 
• 
  
• La Biblia enseña: Pues como vosotros también en otro tiempo erais desobedientes a Dios, pero ahora habéis alcanzado misericordia por la desobediencia de ellos, así también éstos ahora han sido desobedientes, para que por la misericordia concedida a vosotros, ellos también alcancen misericordia. 
• Porque Dios sujetó a todos en obediencia, para tener misericordia de todos. 
• Oh Sumo Hacedor, nada le es oposición al que ha creído en tu gloria;
• porque todos sus pensamientos, son por tu diestra bendecidos. 
• 
  
• La Biblia enfatiza: Bendecid a los que os persiguen; bendecid, y no maldigáis. 
• Gozaos con los que gozan; llorad con los que lloran.
• De todas vuestras obras ante el tribunal de Cristo, sin fingimiento responderéis;
• y su perfecta justicia recibirán. 
•  
• La Biblia constata: Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios. 
• No seáis tropiezo ni a judíos, ni a gentiles, ni a la iglesia de Dios; como yo en todas las cosas agrado a todos, no procurando mi propio beneficio, sino el de muchos, para que sean salvos. 
• Sed de gracia ungidos,
• para traspasar el glorioso umbral de los santos.
•                     Paz de Cristo 

PORQUE SIEMPRE ES TU VOLUNTAD, OH CRISTO

• No con ejército, ni con fuerza, sino con mí Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos. 
• El espacio espiritual de tu existencia está vacío, sino le das lugar a Dios.
• Tus caminos nunca serán eternos, sino finitos;
• porque en su Sagrada Palabra, no han sido concernidos. 
•  
• Has de darle la gloria al Todopoderoso Señor Jesucristo, 
• en todas las pruebas. 
• Tú desconoces la verdad a la que te insta el Santo Espíritu;
• porque en tu propia opinión, no percibirás sus inconmensurables certezas.
• 
  
• Oh Cristo Jesús, 
• nuestra precaria comprensión es manifiesta en la temporal humanidad.
• Y nunca podremos advertir, oh Señor, la magnificente plenitud, 
• de tu eterna verdad.
• 
  
• La Biblia enseña: El hombre, como la hierba son sus días; florece como la flor del campo, que pasó el viento por ella, y pereció, y su lugar no la conocerá más. 
• Mas la misericordia de Jehová es desde la eternidad y hasta la eternidad sobre los que le temen, y su justicia sobre los hijos de los hijos; sobre los que guardan su pacto, y los que se acuerdan de sus mandamientos para ponerlos por obra. 
• Oh Sumo Salvador, hasta la más ínfima de nuestras acciones juzgarás;
• porque los recovecos del alma, conoces de sobra. 
• 
  
• Entonces Jesús les dijo: Mi alma está muy triste, hasta la muerte; quedaos aquí, y velad conmigo.
• Yendo un poco adelante, se postró sobre su rostro, orando y diciendo: Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú. 
• Y es que, tu siervo, oh Rey de reyes, es el verdadero testigo; 
• y predica en tu santo nombre, que la Sagrada Escritura es eterna luz. 
•                   Paz de Cristo 

EL PERDÓN, VALENTÍA SIN LIMITES EN CRISTO

• La Biblia dice: Quítense de vosotros toda amargura, enojo, gritería y maledicencia, y toda malicia. 
• Antes sed benignos, unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo. 
• Oh Altísimo Señor Jesucristo, derrama tu piedad oyendo nuestra súplica, 
• para que en el libro de la vida figure nuestro perdón escrito. 
• 
  
• Oh Cordero inmolado, 
• tu perdón en la cruz del Calvario no tuvo límites.
• Y por su majestuosidad fue tan loado;
• ya que se sustenta en la eternidad de sus sagrados mimbres. 
• 
  
• Y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. 
• La mente perversa del hombre le llevó a ajusticiar al Todopoderoso Rey de la gloria.
• Pero con su muerte, venció al imperio de la muerte; y clavó en la cruz las actas que nos inculpaban, despojando públicamente a los principados y potestades,
• para recibir de gracia la victoria.
• 
  
• Oh Soberano Salvador, 
• estamos necesitados de tu clemencia y misericordia para entrar en la nueva Jerusalén. 
• Y asidos hemos de estar, oh gran Yo Soy, de tu amor,
• para morar en el glorioso Edén. 
• 
  
• Oh Omnipotente Redentor, 
• con tu muerte, sepultura y resurrección nos abriste la puerta del paraíso. 
• Y te ofrendamos infinitas gracias, oh Señor, 
• por ser testigos de tu justicia, que es nuestro eterno regocijo.
•                   Paz de Cristo 

JOB 19:23-27 EN CRISTO

• ¡Quién diese ahora que mis palabras fuesen escritas! ¡Quién diese que se escribiesen en un libro; que con cincel de hierro y con plomo fuesen esculpidas en piedra para siempre!
• Yo sé que mi Redentor vive, y al fin se levantará sobre el polvo; y después de desecha esta mi piel, en mi carne he de ver a Dios; al cual veré por mí mismo, y mis ojos lo verán, y no otro, aunque mi corazón desfallece dentro de mí. 
• Oh Cristo, ante cada vicisitud de mi vida, la gloria habré de darte;
• porque Tú eres el Alfa y la Omega, el principio y el fin.
•  
• Oh Altísimo Señor Jesucristo, el acontecimiento de tus grandiosos bienes, 
• con una mezquina visión superficial he valorado.
• Los rudimentos de mí intelecto no pasaron de incipientes;
• pero tu gracia, oh Señor, me hizo bienaventurado. 
• 
  
• Oh Cristo Jesús, 
• te reconozco como mi Señor y Salvador. 
• Y es que, desde el santuario de tu inaccesible luz,
• fui revestido con la resplandeciente gloria del perfecto del amor. 
• 
  
• Oh Cristo Redentor, 
• en las tablas de nuestro corazón grabaste la excelencia de lo alto.
• Y es tan sobrenatural lo que emana de su fulgor,
• que todo necio que creyó en tu nombre se convirtió en sabio.
• 
  
• Oh Cristo Salvador, en tu excelsa diestra esculpiste el nombre de tus escogidos siervos,
• para que vivan postrados a tus eternos pies.
• Y abrirás la puerta de los cielos, 
• únicamente a los que en ti creyeren, oh Rey de reyes y Señor de señores. 
•                    Paz de Cristo