- He de ofrendarte adoración,
- para servirte con ferviente celo, oh Cristo Jesús.
- Sana mi altivo corazón,
- y no pondrá impedimento a tu inaccesible luz.
- Suple, oh Señor, los rudimentos de mi ignorancia,
- por la sabiduría de lo alto.
- Y me habré desprendido de mi fatua arrogancia,
- para recibir la unción del que de Israel es Santo.
- No hagas desdén de la sobrenatural predicación poética,
- y secunda su sagrada belleza.
- Oh Cristo, ciñe a mi alma con la fe épica,
- y vencerá en toda prueba con espiritual pureza.
- Infinitas gracias, oh Rey de reyes,
- por tu inconmensurable perdón.
- Y porque he confiado en tus majestuosos poderes,
- perseveraré hasta consumar la gloriosa misión.
- Oh Altísimo Señor y Salvador Jesucristo;
- con la espada,
- que de la Palabra es tu Santo Espíritu;
- a mi alma, harás al fin bienaventurada.
- Paz de Cristo
domingo, 23 de mayo de 2021
VIVIFÍCAME EN TU PALABRA, OH CRISTO
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