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viernes, 10 de junio de 2022

SALMO 71:12,13 EN CRISTO

  • Oh Dios, no te alejes de mí; Dios mío, acude pronto en mi socorro.
  • Sean avergonzados, parezcan los adversarios de mí alma; sean cubiertos de vergüenza y de confusión los que mi mal buscan.
  • Oh mi Cristo, el auxilio de tu gracia, ante nuestro clamor, ha sido pronto;
  • y en el reconocimiento de tu gloria, oh Señor, a tus pies se postran.

  • La Biblia dice: Mas yo esperaré siempre, y te alabaré más y más. 
  • Mi boca publicará tu justicia y tus hechos de salvación todo el día, aunque no sé su número. 
  • Vendré a los hechos poderosos de Jehová el Señor; haré memoría de tu justicia, de la tuya sola. 
  • Oh Hijo del Hombre, en el arrebatamiento a tu amada Iglesia salvarás.
  • Y será en el día postrero;
  • cuando los santos se encontrarán contigo, oh Rey de la gloria.

  • La Biblia constata: Oh Dios, me enseñaste desde mi juventud, y hasta ahora he manifestado tus maravillas.
  • Aun en la vejez y las canas, oh Dios, no me desampares, hasta que anuncie tu poder a la posteridad, y tu potencia a todos los que han de venir, y tu justicia, oh Dios, hasta los excelso. 
  • Oh Santo de Israel, Tú has hecho visibles en el firmamento a todas las estrellas;
  • y cada una de ellas, ocupa un lugar en el milimetrado cielo.

  • La Biblia enfatiza: Tú has hecho grandes cosas, oh Dios, ¿quién como tú?
  • Tú, que me has hecho ver muchas angustias y males, volverás a darme vida, y de nuevo me levantarás de los abismos de la tierra.
  • Aumentarás mi grandeza, y volverás a consolarme.
  • Oh Cristo Redentor, en tu sacrificio de muerte, y muerte de cruz; 
  • por tu llaga gloriosa, 
  • nuestros viles pecados sanaste.

  • La Biblia asevera: Asimismo yo te alabaré con instrumento de salterio, oh Dios mío; tu verdad cantaré a ti en el arpa, oh Santo de Israel. 
  • Mis labios se alegrarán cuando cante a ti, y mi alma la cual redimiste.
  • Mi lengua hablará de tu justicia todo el día; por cuanto han sido avergonzados, porque han sido confundidos los que mi mal procuraban.
  • Oh Alto y Sublime, 
  • las almas santas a tu excelsa diestra confiaste;
  • para que en la celestial gloria, eternamente moraran.
  •                 Paz de Cristo 

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