LA SANTIDAD, PUNTO DE INFLEXIÓN EN CRISTO

• La Biblia dice: Por lo cual, levantad las manos caídas y las rodillas paralizadas;
• y haced sendas derechas para vuestros pies, para que lo cojo no se salga del camino, sino que sea sanado.
• Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. 
• Oh mi Cristo, raíz de gloria has puesto en tus almas consagradas;
• para que hayan interiorizado,
• oh Santo de Israel, lo ancho, lo largo, lo alto y lo profundo de tu excelso amor. 
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• Oh Hijo del Hombre, 
• Tú viniste a deshacer las obras del diablo. 
• Y sólo el que hubiere creído en tu glorioso nombre, 
• será eternamente salvo.
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• Oh Fiel y Verdadero, 
• tus buenas nuevas de salvación eterna, 
• las consumaste en la cruz del Calvario;
• haciendo con tu preciosa sangre derramada el nuevo pacto de la sobrenatural gracia.
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• Oh Eterno, 
• ningún perdón tan grande, 
• hubo debajo del cielo, 
• sino el que acrisoló tu majestuosa y bendita sangre.
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• Oh Cristo Altísimo, 
• con el corazón contrito y humillado, 
• permanece a tus pies en el Lugar Santísimo, 
• el que anhela ser tu siervo bienaventurado. 
•             Paz de Cristo