Es una visión perfecta:
en el Cielo brilla su presencia;
y a mi corazón el gozo del amanecer despierta,
para ser en Cristo, un día de excelencia.
Lámpara es el alma,
cuando Cristo,
te ama
en el Espíritu.
Y volví en sí,
para apreciar en Cristo la belleza;
que el mal despojo de mí,
ocultando con argucias su Magnificencia.
Oh Señor, Tú eres la lluvia tardía y temprana,
que con agua Sagrada,
riegas cada mañana
nuestra bienaventuranza.
El río de la Gracia,
da a tu vida autoridad;
porque Jesucristo es el linaje de tu savia,
que te concede Eternidad.
Paz de Cristo
No hay comentarios:
Publicar un comentario