En el poder de la Palabra se da visibilidad a la creación universal.
Y tu vida es el máximo exponente de todos sus prodigios.
Nada es casual; y sí, causal.
Porque el Altísimo Señor Jesucristo es el Todopoderoso Creador: Alfa y Omega de los postulados eternos.
La Biblia dice: En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el verbo era Dios.
Éste era en el principio con Dios. Todas las cosas por Él fueron hechas, y sin Él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. En Él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella.
Y también: Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.
Y es que, del anuncio de las buenas nuevas de salvación eterna,
somos sus hijos escogidos y los heraldos de paz.
Jesús, dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto.
Y también: Aún por un poco está la luz entre vosotros; andad entre tanto que tenéis luz, para que no os sorprendan las tinieblas; porque el que anda en tinieblas, no sabe a dónde va. Entre tanto que tenéis luz, creed en la luz, para que seáis hijos de luz.
Oh gran Yo Soy, todo don perfecto y toda buena dádiva desciende de lo alto.
Y de lo recibido de gracia, damos de gracia; que es la provisión de eterna plenitud.
Oh Cristo Jesús, revelado nos ha sido tu nombre,
para tener el sobrenatural conocimiento de que eres de lo creado el único Dios.
Y sabemos, oh Señor Omnipotente,
que por amor de tu nombre somos tus hijos bienaventurados.
Por tu Palabra, oh Señor y Salvador Jesucristo,
hemos sido provistos de la sagrada unción.
Y que, oh Santo Espíritu,
has dado vida eterna a nuestro arrepentido y consagrado corazón.
Paz de Cristo
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