- Oh Cristo Jesús,
- la mente demoníaca y su fin son de una naturaleza obscura y violenta.
- Necesitamos, oh Señor, la máxima provisión de tu admirable luz,
- para que los principios bíblicos se vean cumplidos en nuestra existencia.
- Creer en tu nombre, oh Altísimo Señor Jesucristo,
- es la ineludible condición.
- Porque has de saber, que el Verbo se manifestó en carne, y habitó entre nosotros.
- Y qué en el Calvario fue su crucifixión, para redención y justificación,
- de los pecadores abyectos.
- Oh Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo,
- tu misión la llevaste a cabo para reconciliarnos con el Padre.
- No ha existido maldad más perversa, que no deshiciera tu Santo Espíritu.
- Y con tu muerte, sepultura y resurrección, vimos el resplandor de tu luz admirable.
- Oh Soberano Redentor,
- la luz siempre prevalecerá sobre las tinieblas.
- Y el odio será vencido por el amor,
- para dar la gloria a Dios, y santificar las almas.
- Oh Alfa y Omega,
- y derramaras tu Santo Espíritu sobre toda carne.
- Y habrá cielos nuevos y tierra nueva,
- para que todo el que haya de gloriarse, en el Señor se gloríe.
- Paz de Cristo
lunes, 14 de junio de 2021
LA CAUSALIDAD Y EL EFECTO DEL PECADOR EN CRISTO
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