- Porque él conoce a los hombres vanos; ve asimismo la iniquidad, ¿y no hará caso?
- El hombre vano se hará entendido, cuando un pollino de asno montés nazca hombre.
- Oh mi Cristo, de tu bendición aun recibirá el que te ha hecho escarnio;
- si se arrepintiere postrado a tus pies con el corazón contrito y humillado, habiendo creido fervientemente en tu majestuoso nombre.
- Si tú dispusieres tu corazón, y extendieres a él tus manos;
- Si alguna iniquidad hubiere en tu mano, y la echares de ti, y no consintieres que more en tu casa la injusticia,
- entonces levantarás tu rostro limpio de mancha, y serás fuerte, y nada temerás;
- y olvidarás tu miseria, o te acordarás de ella como de aguas que pasaron.
- Oh Cristo Jesús, los que por tu gran misericordia nos santificamos,
- y no hubieremos caido en la mofa y en la befa de la estulticia,
- habremos interiorizado la gracia, oh Señor, que Tú nos das;
- para ser los genuinos siervos, que para siempre te glorificaron.
- La vida te será más clara que el mediodía; aunque oscureciere, será como la mañana.
- Tendrás confianza, porque hay esperanza; mirarás alrededor, y dormirás seguro.
- Oh Rey de la gloria,
- en tu provisión de santidad, se vivificará la predicación del discípulo que es Cristocéntricamente puro.
- Te acostarás, y no habrá quien te espante; y muchos suplicarán tu favor.
- Pero los ojos de los malos se consumirán, y no tendrán refugio; y su esperanza será dar su último suspiro.
- Oh Hijo del Hombre, no podemos apreciar lo que excede de todo conocimiento, que es tu eterno amor.
- Sin embargo, está a nuestro alcance, oh gran Yo Soy, el profesarte adoración con la la fidelidad del verdadero heraldo.
- Paz de Cristo
martes, 24 de octubre de 2023
JOB 11:11,12 EN CRISTO
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