CIRCUNCIDAD EL CORAZÓN EN CRISTO

Desviste el corazón,
de las entenebrecidas vestiduras del maligno. 
Y que sea revestido con el blanquisimo lino de la Unción,
que de su Gloria da Cristo. 

De manera despiadada, 
las tinieblas secuestraron nuestro espíritu. 
Elevamos un gran clamor al Cielo, en el íntimo amanecer de la alborada;
y nos oyó el Omnipotente Jesucristo.

Oh Cordero Inmolado, en tu expiración, dijiste: Consumado es. 
El velo del Templo fue circunciso.
Y el Amén nos reveló el don de la fe,
para gloriarnos en el Lugar Santísimo.

Donde está el Espíritu del Señor, 
hay libertad. 
Dad la excelencia del amor, 
y descubriréis la eminentísima Verdad.

El misterioso Espíritu de la Resurrección, 
convirtió en un milagro manifiesto la irremisible muerte de Cristo. 
Audible fue el latido de su corazón; 
y dio Vida al que creyó, en la Salvación del Altísimo.
                      Paz de Cristo