Oh Cristo, elevamos nuestra plegaria al Cielo,
para que tengas misericordia
delante de nuestro yerro;
y seamos guardados incorruptibles en tu perfecta Gloria.
La arrogancia es mala consejera,
al verse ensimismada en su torpeza.
Oh Señor, pon sobre las almas tu Eterna Diestra;
y hazlas menguar, hasta que la comprensión de su insignificancia nos sea manifiesta.
Detente en tu exiguo tiempo,
e intenta medir cada honda del mar.
Todas ellas han sido creadas por el Dios Eterno;
para que tu seas capaz de amar.
Jesucristo, con la Palabra creó el Universo.
Llénate de su Todapoderosa Excelencia;
y si yerras en el cumplimiento de algún bíblico verso,
pídele a Él clemencia.
Nuestra libertad es Cristocéntrica.
Has de seguir los pasos de Jesús;
y poner tu pie con precisión en su huella,
para que el mediodía en tu corazón sea su resplandeciente Luz.
Paz de Cristo
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